¿Cómo evitar los engaños más comunes en los restaurantes?

¿Cómo sabe que usted sólo está pagando por la comida y el servicio, sin ningún costo adicional? Hay muchas cosas que usted puede hacer antes y durante su viaje para asegurarse de que, al terminar la comida, sólo le cobren aquello que comió:

El menú,
por favor

Todos los
restaurantes ven con buenos ojos la llegada de nuevos clientes. Pero una vez que
usted encuentra una mesa y pide una bebida, el mozo puede estar dispuesto a
recomendarle el plato especial de la casa sin darle tiempo para ver el menú
completo. El mozo estará más que dispuesto a decirle todo sobre las
especialidades del chef. Pero puede que no le diga cuánto cuestan.


Antes de aceptar la amabilidad del mozo, revise todo el menú. En muchos países,
se requiere que los restaurantes y establecimientos gastronómicos publiquen sus
servicios completos, y sus precios, para inspección pública.

Por lo tanto, usted está en todo su derecho de elegir cualquier plato del menú,
en lugar de aceptar la primera sugerencia del camarero.

Si el mozo se niega a mostrarle el menú, o no quiere esperar a que usted decida
qué pedir, entonces simplemente váyase; no vale la pena tener que soportar a un
mal mozo por una buena comida.

Acceso a la
cuenta


Una vez que usted ha sido saciado con comida y bebida, llega el momento de
pagar. Cada cultura tiene diferentes formas para pedir la cuenta, pero el
resultado es siempre el mismo: un camarero le lleva a su mesa una factura
detallada. Entonces, ¿qué pasa si un mozo no le trae la factura, y en su lugar
le dice el costo total oralmente? ¿Cómo sabe que usted está pagando sólo por lo
que comió?


Si usted siente que la cuenta es demasiado elevada, o no se condice con lo que
usted pidió, tiene el derecho de revisar una copia escrita de la factura.

En algunas partes del mundo, usted debe hacerse responsable de conservar la
factura. Dependiendo de dónde se encuentre, sus recursos pueden variar.

En muchos casos, tener una discusión con el encargado puede resolver la
situación. En algunos lugares, como en Italia, suele haber oficiales especiales,
disponibles para resolver este tipo de disputas.

Independientemente de su ubicación, las controversias sobre el monto a pagar
pueden resolverse con una factura por escrito.

El servicio
no siempre se cobra extra


Los países de América son algunos de los pocos que no incluyen el servicio en el
precio de la comida. Es por eso que las propinas son una práctica común y
aceptada en toda América. Pero, ¿sucede siempre lo misma cuando viajamos al
extranjero?

Hay muchas situaciones en las que las propinas resultan aceptables y apreciadas.
En eventos especiales, como fiestas, las propinas se consideran una recompensa
por los buenos servicios prestados, y son bien recibidas.

Sin embargo, en otros lugares, como en los restaurantes, las propinas no son
aceptadas, porque el servicio está incluido en el precio de la comida.


Entonces, ¿cómo se puede saber si usted debe dejar propina o no? Antes de llegar
a su destino, investigue acerca de las costumbres locales sobre las propinas.

Una rápida búsqueda en internet puede decirle si usted debería o no dejar
propina al comer en un restaurante en el extranjero.

Otra forma rápida de averiguarlo es fijándose en el menú. Si dice que el
servicio no está incluido, o que el servicio se cobra extra, entonces debería
incluir una propina al pagar la cuenta.


¿Qué pasa si el mozo le reclama una propina por sus servicios? Una vez más, los
recursos son diferentes dependiendo de donde esté.

Una simple conversación con el encargado podría aclarar cualquier duda que usted
pudiera tener, y evitar que un mozo sin escrúpulos se aproveche de usted.

Conociendo
sus derechos, usted puede asegurarse de disfrutar de una comida saludable, sin
que eso implique una cuenta excesiva.

Investigar antes de viajar puede ayudarlo a sacar el máximo provecho de sus
aventuras, sin importar a qué parte del mundo vaya.