Los beneficios se advierten tanto a nivel físico y emocional. Proporcionan una sensación relajante y devuelven el equilibrio tan necesario al organismo. La regularidad en su aplicación es la clave para potenciar todas sus ventajas.
Los masajes son muy útiles para aliviar las contracturas ocasionadas por las tensiones diarias. “Más allá del alivio que se siente cuando se está procediendo con el masaje, hay que tener en cuenta que la piel también resulta beneficiada.
Se eliminan las células muertas y el masaje ayuda a eliminar las toxinas. Los masajes alivian dolores, mejoran la circulación y promueven el flujo de energía. Tanto adultos como niños pueden favorecerse y comenzar a vivir una vida mejor, más relajada y placentera”, comenta la masajista argentina Tamara Cardona.
Masajes básicos paso a paso
Espalda:
Es necesario contar con un aceite que debe frotarse con suavidad por toda la zona. Una vez que se ha desparramado bien, se comenzará con las yemas a hacer pequeños círculos.
Primero se empezará con una mano y de a poco se irá incorporando la otra mano. Cada vez más rápido se irá recorriendo toda la espalda. Hacer este ejercicio durante tres minutos.
Luego, presionar suavemente con los nudillos de una de las manos, sumar la otra mano y comenzar a hacer un poco más de fuerza. Recorrer toda la espalda. Enseguida, colocar ambas manos en la espalda de la persona y aplastarlas un poco.
La presión debe ser suave, sobre todo las primeras sesiones. Para finalizar, se realizará un “amasado” para relajar la zona. No olvidar la zona de los hombros y el cuello.
Abdomen:
Con la palma de la mano hacer deslizamientos suaves, pero amplios. Abarcar la cadera y la zona de la cintura. Con las yemas, presionar levemente por todas partes.
Es conveniente colocar un aceite o crema hidratante para que las manos se deslicen adecuadamente sin obstáculos. Es importante que los masajes en esta área sean suaves. “Más que masajes estaríamos hablando de caricias”, aconseja la especialista.
Cuello y rostro:
Con el pulgar presionar durante un minuto la zona media del mentón. La intención es relajar la mandíbula. Formar pequeños círculos con las yemas e ir bajando hacia el área del cuello.
Recorrerlo suavemente primero con las yemas y luego con la palma abierta. Intentar hacer este masaje durante cinco minutos. Es conveniente realizar este masaje al finalizar la jornada de trabajo ya que durante el día se acumulan muchas tensiones.
Pies:
Remojar los pies en agua tibia durante diez minutos. Comenzar con los talones. Realizar presión con los dedos pulgares. De a poco ir subiendo hasta masajear el pie completo con un ritmo corto y preciso.
Masajear nuevamente con movimientos circulares durante cinco minutos. Sentarse cómodamente y sostener el pie con las dos manos. Con las yemas, presionar con fuerza sobre aquellas áreas que más dolor causan.
Sostener la presión durante algunos segundos y luego acariciar suavemente. Aplicar una crema antiinflamatoria en caso de que se necesario.
Recomendaciones para hacer masajes
Los masajes se tienen que aplicar en un ambiente adecuado. “Hay que preparar un sitio relajado y con armonía. Se puede colocar música tranquila, velas aromáticas o sahumerios. Todo es válido si lo que se intenta es crear la atmósfera apropiada”, aconseja al especialista.
Si no se tiene experiencia es la aplicación del auto masaje, lo más indicado es poder efectuarlo de modo muy suave para evitar contracturas peores o dolores que puedan incidir negativamente y que luego requieran de un tratamiento para eliminarlos.
“Para realizar el masaje de espalda siempre hay que contar con la ayuda de un profesional. Por más buena voluntad que tengan los amigos o familiares, si no saben lo que hacen pueden llegar a producir una lesión”, finaliza diciendo la masajista.
El Experto en Romance de Oprah, Michael Webb, es el autor de 500 Consejos para Hacerlo Mejor, un libro lleno de maneras de condimentar su vida amorosa, añadir más pasión, placer e intimidad a su experiencia.
Para saber más, haz clic aquí
