Si usted no sabe nada sobre
yoga, puede pensar que se trata de retorcer su cuerpo en posiciones difíciles, realizadas sobre una esterilla. Pero la realidad es que el yoga puede practicarse también sentado.
Las poses para hacer sentado son una gran manera para que casi todo el mundo pueda practicar yoga, en cualquier momento. La silla soporta su peso, para que pueda encontrar una posición más profunda sin dejar de sentirse seguro y firme.
Recuerde que debe escuchar a su cuerpo. Usted no debe sentir dolor al practicar yoga. Otro consejo: si usted se sienta con la espalda recta sin usar el respaldo de su silla, se le fortalecerá la espalda al realizar sus actividades cotidianas.
Estas son seis posiciones de yoga en silla que usted podría probar:
POSICIÓN “SACUDIDA”:
Afloje las articulaciones rígidas agitando los brazos y las piernas en el aire. Comience sacudiendo una pierna por vez; luego, agregue los brazos cuando su espalda se vuelva más fuerte.
Recuerde que debe sacudir el tronco durante unos segundos y luego mantenerlo erguido. Esto no sólo le aflojará las articulaciones, sino que además fortalecerá su espalda, de forma que usted será lo suficientemente fuerte como para sacudir las piernas y los brazos al mismo tiempo.
POSICIÓN “VENTILADOR”:
Comience sentado en el borde de una silla firme, con respaldo. Sus pies deben estar firmemente apoyados en el suelo, separados por el ancho de su cadera. Lleve ambos brazos hacia atrás y agárrese al respaldo de la silla.
Estire los omóplatos hacia la espalda, expandiendo el pecho. Inhale profundamente y, al exhalar, inclínese hacia adelante, empezando por el pecho. Mantenga la posición entre 5 y 10 respiraciones y afloje lentamente.
Para terminar, envuélvase a usted mismo con sus brazos, para contrarrestar el estiramiento.
ESTIRAMIENTOS LATERALES:
Tome un cinturón o una correa y siéntese con la espalda recta. Levante los brazos, estirando el cinturón hasta que quede tenso. Inhale profundamente mientras se inclina ligeramente hacia la derecha y exhala, luego vuelva a enderezarse.
Repita esta secuencia hacia el lado izquierdo. Una vez que se haya fortalecido, mantenga el estiramiento lateral durante varias respiraciones, lo que ayudará a fortalecer la espalda. Recuerde respirar profundo y moverse lentamente, manteniendo el ritmo.
GIROS ESPINALES:
Inhale profundamente y estire su columna vertebral; luego gire hacia la izquierda, mientras lentamente miran sobre su hombro izquierdo. Mantenga esta posición durante tres respiraciones y vuelva a la posición inicial.
Repita el movimiento hacia el lado derecho.
ESTIRAMIENTO INGUINAL:
Siéntese en su silla con la espalda recta. Abra las piernas ampliamente y presione con las manos sobre sus muslos, inclinándose hacia delante con la espalda recta.
Debe sentir cómo se estiran sus piernas y su espalda baja. Mantenga la posición durante una respiración y vuelva a la posición inicial. Una vez que se sienta seguro haciendo esta posición una vez, realice de 3 a 5 repeticiones.
RESPIRACIÓN:
Siéntese con la espalda recta y ponga las manos sobre el vientre. Relaje su cuerpo y respire lentamente. Trate de relajarse lo suficiente como para bajar su respiración hacia su vientre.
Practique estas posturas a diario para aumentar su conciencia corporal y fortalecer la parte superior del cuerpo.