Los factores claves para realizar adecuadamente la actividad son la respiración, la posición, la forma y la técnica del pedaleo.

La primera clase de indorr cycling consta de una charla teórica sobre todo lo relacionado a este deporte.

Se explica de qué modo se debe ajustar la bicicleta, cuál debe ser la posición corporal, de las manos y la frecuencia cardíaca correcta que se debe tener y mantener.

De a poco se irán practicando diversos ejercicios. Una vez se tenga práctica se irá desarrollando la fuerza muscular hasta lograr una mejor condición cardiovascular cada vez.

La práctica del indoor cycling puede llegar a quemar hasta 800 calorías en una sola sesión. La resistencia que se puede adquirir ejercitando en una bicicleta fija es sumamente importante si se pretende luego lanzarse a pedalear fuera.

Las bicicletas que existen en los gimnasios incluyen un dispositivo mecánico que se modifica en base a la dificultad del pedaleo. El manubrio también es especial.

Los pedales están equipados con soportes similares a aquellos de las bicicletas deportivas para permitir que un pie se deslice hacia arriba cuando el otro está empujando hacia abajo.

Las clases y a supervisión de un profesional resultan imprescindibles para evitar lesiones que se pueden ocasionar si la posición del ciclista no es la adecuada.

Entre los malestares más frecuentes ocasionados por una mala postura se encuentran el dolor de espalda y el de rodillas.

Esta práctica fortalece los músculos de la parte inferior del cuerpo. Tonifica los cuádriceps y si se hace correctamente se trabaja positivamente la espalda y las caderas.

Algunas sugerencias importantes para el indoor cycling

Aunque hay videos que enseñan las posturas correctas y cómo ir agregando ejercicios a medida que se adquiere práctica, lo mejor es poder contar con un profesional que guíe al practicante durante los primeros meses de entrenamiento para que no haya lesiones graves y para asegurarse de que se hacen los ejercicios adecuadamente.

Una vez se tenga en claro la manera de sentarse y la fuerza que se debe ejercer, se podrá por cuenta propia seguir practicando en casa.

No hay que olvidar que antes de subirse a la bicicleta se deben hacer ejercicios básicos de estiramiento.

Es conveniente comenzar siempre con ejercicios muy livianos aunque se crea que se tiene una base o buena resistencia. La manera de obtener mejores resultados es ir de a poco y paso a paso.

Con treinta minutos tres veces por semana es suficiente para ver las mejores físicas y sobre todo para mantenerse saludables.

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