Una gran cantidad de checos emigró a toda América durante los dos últimos siglos, escapando de las persecuciones o de la pobreza. Si usted desciende de alguno de ellos, le contamos como podría llegar a saber más sobre sus ancestros

 

El primer checo
del que se tiene conocimientos sobre su arribo a América, fue Augustin
Herman(n) que arribó a New Ámsterdam, Estados Unidos, en 1633. Sin embargo, la
mayoría de los genealogistas que investigan las raíces checas en América, están
interesados en un grupo más reciente de inmigrantes, que llegaron sobre todo
entre los años 1848 y 1914.

Las pistas sobre
la ascendencia checa, pueden ser encontradas en fuentes caseras, tales como
viejas cartas, documentos, biblioratos, avisos fúnebres, internet, recortes de
periódicos checos, censos, documentos de las iglesias, inscripciones en la lápida
del cementerio, y, por supuesto, consultando con otros familiares.

Debe estar
seguro de poseer el apellido correcto, con su correspondiente deletreado y
significado. A menudo, los apellidos eran convertidos a su equivalente en
castellano, luego de que los inmigrantes llegaran a Sudamérica.

Antes de la
Primera Guerra Mundial, sus antepasados pudieron haber sido registrados como
bohemios, de Bohmen, Alemania, y Cechy, de Checoslovaquia, ya que los documentos
de censos de muchos países realizados entre 1880 y 1920, pueden hacer
referencia a lugares de nacimiento tan dispersos como Bohemia, Moravia, Hungría
o Austria, dependiendo del período en el que eran confeccionados.

Los censos
también pueden proporcionarle información sobre la naturalización y la fecha
en que estos antepasados llegaron a América, lo que le podría abrir las
puertas para buscar las listas de pasajeros y los expedientes de naturalización.

Entre 1850 y
1880, algunos checos llegaron a este continente escapando de la dominación
austriaca. Otros, eran granjeros que no pudieron seguir con su trabajo por las
condiciones climáticas o la situación económica.

Muchos se dedicaron a
trabajos relacionados con carpintería, por lo que no sería una mala idea
averiguar que industrias se dedicaban a este rubro a principios de siglo, para
luego intentar tomar contacto con ellas.

En todos los casos, se reunían en
grupos, tenían sus propios círculos sociales, mantenían sus costumbres, e
incluso fundaban una institución comunitaria.

Sus puertos de
embarque, solían ser sobre todo Bremen, Hamburgo y Amberes. Si bien es cierto
que la mayoría provenía de Hamburgo, también se dieron casos de checos que
partían de LeHavre o de Rotterdam.

En internet, es
posible encontrar algunas listas de pasajeros checos, que han sido publicadas
por Leo Baca. Sus nueve volúmenes, cubren el período que va desde 1848 hasta
1899. Esta información se puede encontrar en el sitio Web, http://members.home.net/lbaca/.

Si cree o tiene
datos que su ancestro pudo haber pasado primero por los Estados Unidos, podría
consultar con el Immigration History
Research Center
(IHRC) de ese país,
que contiene una extensa colección de libros, periódicos, folletos,
documentos, y manuscritos sobre la emigración checa en ese país.

Existen más
de 1.000 volúmenes y ficheros impresos, sobre aproximadamente 30 periódicos
que van desde 1860 al presente. Muchos están escritos en lenguaje checo, y los
demás en inglés.

El centro está situado en la Universidad de Minnesota, en
Minneapolis, pero usted puede contactarse con él a través de su sitio en
Internet, en http://www.umn.edu/ihrc/czech.htm#top.

Para aprender más
sobre su ascendencia checa y la historia checa, puede leer un excelente libro
checo que se ha traducido al inglés.

Cuenta la historia de los checos que
emigraron a toda América, y ha sido escrito por Jan Habernicht. Fue
originalmente publicado en 1904, pero ha sido traducido y reimpreso en 1996 por
la Sociedad Genealógica Checoslovaca Internacional.

Para más información
sobre este libro, puede ingresar a http://www.cgsi.org/sales/book.htm
o escribir a la Sociedad Genealógica Checoslovaca Internacional, PO Box 16225,
St. Paul, MN 55116-0225, Estados Unidos.

Debe tener en
cuenta que el lenguaje checo fue mantenido por algunos de los inmigrantes
durante todo el siglo veinte, por lo que las inscripciones en las lápidas, los
archivos de las iglesias, las viejas cartas y otros documentos pueden estar únicamente
en ese idioma.

Por lo tanto, si por
ejemplo usted busca los términos padre y madre, podría necesitar buscar las
palabras Vater y Mutter (en alemán) u otec y matka,
(en checo).

Para aprender más sobre el lenguaje y las traducciones checas
(al inglés) puede visitar a una página Web que contiene un muy útil
vocabulario básico de genealogía en alemán-checo-inglés. Su dirección es http://www2.genealogy.net/gene/reg/SUD/dictionary.html.

Hay muchos
excelentes sitios de Internet dedicados a la búsqueda de la ascendencia checa.
Varios aspectos sobre la genealogía checa se pueden encontrar en http://freepages.genealogy.rootsweb.com/~elainetmaddox/czgenealogy.htm.

A través de este sitio, se pueden hacer muchas conexiones con otras páginas
checas. Otro completo website al respecto, es http://rootsweb.com/~czewgw/.

A través de la
información que estas páginas proporcionan, respecto a las costumbres
familiares, las historias y las tradiciones de los checos, se puede comenzar a
obtener pistas sobre su propia ascendencia checa. Y si no lo logra, al menos
sabrá mucho más sobre la vida que llevaron sus antepasados.