Llamamos
Presbiacusia, a la disminución fisiológica y paulatina de la audición; que
afecta a personas adultas a partir de los 40 años de edad en adelante, tanto en
hombres como en mujeres, predominando en las últimas.
La
misma se puede presentar de diferentes maneras, las características en rasgos
generales que hacen a dicha enfermedad son:
–
Hipoacusia (disminución progresiva de la audición)
–
Acúfenos (sensación subjetiva del paciente de presencia de diferentes
tonalidades de zumbidos relacionados con el tipo de disminución auditiva)
Claro
que éstos síntomas, pueden estar acompañados de otras sintomatologías, que
hacen al tipo de vida que el sujeto desarrolló y desarrolla; como por ejemplo:
si trabajó o trabaja en ambientes ruidosos (fábricas, construcciones, como
también aquellas ama de casa que utilizan para el quehacer doméstico durante
muchas horas electrodomésticos ruidosos).
Anteriormente
se mencionó la predominancia de la Presbiacusia en las mujeres, y no es
casualidad que sea así.
Esto se debe, entre otros factores al número de
embarazos que hallan tenido, ya que en el transcurso de los mismos, se suscitan
grandes cambios hormonales a nivel corporal, y gran parte de esos cambios repercuten en el bebé durante su desarrollo a lo
largo del período embrionario. Las hormonas pueden afectar en mayor o menor
grado el sistema auditivo y su irrigación.
Todo
lo expuesto anteriormente, varía según las características particulares de
cada individuo, teniendo en cuenta su pasado y su presente.
Pero
hay que tener en cuenta que de la hipoacusia a la sordera (pérdida total de la
audición) hay solo un paso, y que a la pérdida auditiva provocada por el
envejecimiento propio de las células, se suma la situación del ambiente
actual, que no ayuda, dado que los ruidos ambientales son cada día más
importantes, llevando la pérdida auditiva a edades más tempranas.