Desde hace muchos años se habla en todos los medios de la Contaminación Ambiental, mostrándonos las consecuencias de los daños que generamos en el medio ambiente, pero casi nunca se habla de las maneras para evitar estos daños, y para colmo de males, los que lo hacen pocas veces se informan a conciencia sobre el tema que tratan.
Me movió a publicar este texto las barbaridades que escuché y leí al respecto, sobre la ley que intenta sacar de circulación las bolsitas plásticas que entregan los supermercados.
Nunca había leído tantas falacias juntas sobre un tema; y lo que más me llamó la atención, fueron las notas publicadas en los diarios de primer orden, donde mentían desde el propio título de la nota que generalmente era del tipo: “Prohíben las bolsitas de Náylon”; “No a las bolsitas de Náylon”; etc.; cuando la realidad es que las bolsitas son de “Polietileno”.
Por otra parte, es entendible que titulen como las denomina el común de la gente, lo que no se entiende es que en la nota no se haga la salvedad, ya que se trata de dos materiales muy distintos, siendo el polietileno el más reciclable y reciclado de todos los materiales plásticos.
Prohibir la utilización de las bolsitas plásticas en los supermercados, pensando que esa es la solución a que no las veamos más flotando en los ríos y mares, es un gran error, la única manera de que esto no pase más es educando y concientizando, o suprimiendo a la raza humana, que de hecho, sino se compromete a dejar de contaminar, es muy factible su desaparición en un tiempo no muy lejano.
Como decía antes, al leer tantas falacias sobre uno solo de los materiales mal culpados de contaminantes, me motivó a escribir lo que sigue para que tomemos conciencia y ayudemos a cuidar nuestro ambiente.
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