La
primera
postal
fue introducida en Austria, en 1869, por el Dr. Emanuel Hermann.
En una de sus caras, tenía un espacio para redactar un mensaje, mientras que en
el otro, había un lugar para inscribir la dirección.
Sin
dudas, eran mucho más prácticas que la carta, ya que no requerían sobres, su
franqueo era más barato, y brindaban la oportunidad de mostrar el lugar en el
que se estaba residiendo o visitando. Para 1900, las postales ya se contaban por
miles, y no había persona que no tenga una colección de ellas.
La evolución de
las postales
Al
analizar la evolución de las postales, se pueden descubrir 7 etapas diferentes
1. La era pionera,
1893-1898:
Para 1893, las postales empezaron a comercializarse en Estados Unidos, más
precisamente en la Columbia Exposition
Chicago, y rápidamente se propagaron por toda América. Estas postales, que
suelen aparecer con las estampillas de los presidentes de aquel entonces, se
dividían en tres categorías: “Souvenir
Card”, para entregar como obsequio, y “Mail
Card” para enviar cualquier tipo de mensaje.
2. La era de las
postales privadas, 1898, 1901: Se empezó a
oficializar en toda América el permiso para imprimir postales con sello postal
propio. Estas postales solían tener la inscripción “Private
Mailing Card” o “Tarjetas de Correo Privadas”.
3. La era del
mensaje delantero, 1901, 1907: Por esos años,
se comenzó a utilizar una postal que poseía un espacio a la izquierda del
frente para escribir el mensaje, y otro detrás, solo para incluir la dirección.
4. La era de la
dirección y el mensaje trasero, 1907, 1915: Aquí,
ya se podía incluir el nombre y la dirección en el reverso del cartón.
5. La era del borde
blanco, 1915, 1930: Para ese entonces, comenzaron a
importarse postales de Alemania, que por su baja calidad, eran retocadas en los
Estados Unidos.
6. La era de las
“económicas”, 1930, 1945: Durante ese
lapso, se empezaron a masificar por su bajo precio.
7. La era del
fotocromo, 1939 al presente: parecidas a como las conocemos
ahora, con mucho color y brillo. Se comenzaron a utilizar para hacer propagandas
de hoteles, moteles, motos, automóviles, o negocios, y se empezaron a entregar
gratuitamente en estaciones de servicios, restaurantes, hoteles, teatros, y
estadios.
Esta
masificación en el uso de las postales, produjo que casi todas las personas
enviaran o recibieran alguna, por lo que en la actualidad, a través de ellas, se pueden rastrear muchos vínculos familiares.
Introduciéndose
en las postales
Tomas
Glus, un empresario de Estados Unidos, no estaba tan interesado en sus raíces
genealógicas, puesto que no tenía familiares perdidos, como sí en conocer en
el pueblo donde ellos habían vivido. Esto pudo ser resuelto por una postal
enviada por su abuelo, que tenía inscripta la frase “esta es mi ciudad” en
el frente, en donde se podía observar una estación con el nombre de la ciudad.
Es
que en ese entonces, era muy común que las postales posean la fotografía de
las estaciones de tren, de las escuelas, parroquias, calles, negocios, u otras
instituciones.
De
hecho, es muy posible que se sorprenda de la gran cantidad de postales que había
sobre su pueblo o ciudad, sobre a partir de 1900, cuando se masificó la
fotografía, mostrando inclusive sus rincones más escondidos. Esas postales, se
pueden comprar hoy en día por pocos centavos.
Las
postales suelen ser entonces una excelente manera de ver el paso del tiempo,
comparando la fotografía del lugar tomado décadas atrás, con ese mismo sitio
en la actualidad.
Familia y amigos
Las
postales también le permiten identificar a miembros de la familia y amigos. Son
varios los casos de personas que tuvieron en sus manos postales firmadas con el
nombre y apellidos de quienes las enviaban, y que luego se comunicaron con
personas que poseían ese mismo apellido en la guía telefónica, ofreciéndoselas
así a quienes deseaban tener
objetos de sus antepasados. También, pueden ser recontactados familiares de
amigos de nuestros ancestros, o parte de su familia política, ya que los
nombres y apellidos de los parientes de estas personas, figuraban en alguna de
nuestras postales.
Encontrando
postales
El
primer lugar para encontrar postales es en las cajas de fotografías y/o cartas
que guardamos en nuestros roperos. Pero además, y por unos pocos centavos,
podemos conseguirlas en las casas de antigüedades, ferias, puestos de venta de
revistas y libros usados, e internet.
Los
investigadores afirman que no es muy difícil conseguir postales usadas, y
tampoco dar con la de un familiar si es que ésta todavía existe, ya que la red
de ventas es relativamente pequeña, y un vendedor suele contactar, en caso de
no poseer lo que se busca, con otro vendedor.
Muchas
personas evalúan las postales por el estado en que se encuentran. Pero nosotros
pensamos que las mejores son aquellas que tienen inscriptos mensajes, ya que
tienen más vida, son más interesantes, cuestan menos, y pueden otorgarnos
mucha información. Por lo tanto, revise su alrededor y fíjese que postales
puede encontrar… para ilustrar su pasado.
Para buscar en internet
En
internet, existe una gran cantidad de sitios (en inglés) destinados a las
postales:
Internet
Postcards and Collectibles Club: www.web-pac.com/mall/club/default.htm
Jim
Mehrer´s Postal History: www.postal-history.com
Metropolitan
Postcard Collectors Club: www.metropc.org
Postcard
International: www.vinagepostcards.com
Web-Pac
Antiguedades, Postales, Autógrafos, estampillas, y todo lo relacionado al
correo: www.web-pac.com/mall/