El Feng Shui y el jade

Lugar y usos de este material en la cosmología china y en el feng shui.

La
palabra “jade” sugiere misterio. En la cultura china, representa la
nobleza, la perfección, la constancia y la inmortalidad y lo consideran
” la esencia del cielo y la tierra”. Para la antigua cosmología
china, el firmamento tenía forma redonda y la tierra  cuadrada. Así, a
los dioses de los cielos se les dedicaban adornos de jade de carácter ritual
con forma redonda y un agujero en el centro, y a los espíritus de la
tierra se les ofrecían adornos de jade alargados y huecos de lados
rectangulares. Según una antigua leyenda china, el fénix y el dragón son
deidades animales, que dieron origen a los clanes familiares. Este es el motivo,
por el que el jade, se empleaba frecuentemente como material para elaborarlos
como adornos. Éstos simbolizaban el porte noble de un caballero, y dieron
origen al dicho chino: “Los principios morales de un caballero son como el
jade”.


 En
la antigüedad se celebraban ciertos ritos institucionalizados, para los cuales
eran precisos  los utensilios rituales. Estos  se empleaban en los
sacrificios ofrecidos a los antepasados o en ceremonias en honor a los
dioses del cielo y de la tierra. La idea de un cielo redondo y una tierra
cuadrada, que acabaría por calar muy hondo en la mentalidad china, surgió en
esa época.


 “Los
vivos utilizan el jade como signo de su integridad moral, y a los muertos se les
acompaña para reconfortar sus almas”. Hace más de cuatro mil años, en
China se depositaba una gran cantidad de utensilios de jade alrededor de los ataúdes
o encima de éstos, de esta forma, se representaba la comunicación de cielo y
tierra y la relación del hombre con el mundo espiritual. Posteriormente, se pasó
a elaborar objetos destinados específicamente para los entierros, con la
creencia de que las cualidades de nobleza, perfección, constancia e
inmortalidad que encerraba el jade evitarían la putrefacción del cuerpo físico.
Como ejemplos de objetos de uso funerario, podemos citar una figura de cigarra
delgada y ligera que se colocaba en la boca del cadáver y un cerdito
grueso y rollizo que se ubicaba en las manos. La cigarra se entierra y
“renace”, posteriormente tras desprenderse de su piel. El cerdo se
reproduce con gran rapidez, lo que significa un aumento de la riqueza. Estos
motivos tomados de la naturaleza, sirven para expresar el deseo humano de
reencarnarse o de que se multipliquen las riquezas de una familia. 


 Se
considera el regalo ideal para celebrar el compromiso de una pareja, así como
el nacimiento de un hijo. Aún hoy, los chinos mantienen la creencia de que no
sólo es bello, sino que también protege de las desgracias y trae buena suerte.


Fuente:
Orientación
Feng Shui