– Hoy es un día especial para mí: estoy celebrando.
– ¡Qué coincidencia!, – dijo la mujer, – yo también estoy celebrando.
Ambos levantaron sus copas y las entrechocaron, y ella le preguntó,
– ¿Y se puede saber qué estás celebrando?
– Tengo una granja avícola muy importante, – contestó el
hombre
– Durante años mis gallinas eran infértiles, pero hoy en día, finalmente, son
fértiles.
– ¡Qué coincidencia!, – dijo la mujer.- Mi esposo y yo hemos estado tratando de
tener un bebé.
Hoy día, ¡mi ginecólogo me ha dicho que estoy embarazada!
¿Cómo hiciste para que tus gallinas se volvieran fértiles?, – preguntó ella.
– Cambié de macho, – contestó el hombre.
– ¡Qué coincidencia! – dijo ella…
Enviado por Milena. ¡Muchas gracias!
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