En el siglo XVIII, para intercambiar nuestros pensamientos o compartir experiencia teníamos que
enviar cartas, que podían llegar a su destinatario con más de un mes de retraso
y esperando otro tanto para recibir una respuesta.
En el siglo 19 se inventaron el telégrafo eléctrico y el
teléfono, que sigue siendo una creación genial, y que permitía conectarse a
lugares tan lejanos sin sentir la distancia.
El siglo 20 nos ha traído un medio de comunicación más poderoso,
llamado Internet , la gente se comunica y se conecta a través de correos
electrónicos, e incluso se llaman y ven a la persona en vivo por medio de una
pantalla.
En 1996 dos jóvenes israelíes crearon ICQ (“I seek you” o “te
busco” en español), fue la primera mensajería instantánea para ordenadores, que
llegó a ser una plataforma de comunicación por todo el mundo, involucrando 50
millones de personas en 1999. Por este medio se podría escribir mensajes de
texto y enviarlos rápidamente.
Fue después, a principios del 2000, que se desarrollaron las
tecnologías de Voz sobre Protocolo de Internet (Voice over Internet Protocol o
VoIP), que necesitaban utilizar la banda ancha de Internet y llegaron a
introducirse masivamente en el mercado desde el 2004.
En el año 2003 en Tallin, Estonia, fue creado el programa Skype , que era y quizás es
todavía, el medio más utilizado para hacer videollamadas. Su servicio era
absolutamente seguro, permitía conectarse por la red con cualquier persona y
mantener la privacidad intercambiando la información.
A pesar de tener videollamadas en Skype, se puede también enviar
mensajes de texto, o hacer llamadas de voz, pero la aplicación resulta “pesada”,
es decir que utiliza muchos bytes para la conexión.
Es por eso que en el año 2007, durante su viaje por Sudamérica,
Jan Koum y Brian Acton pensaron en una aplicación, en la cual podías mantenerte
en contacto con los demás incluso teniendo un acceso limitado a Internet. Fue
así, que en 2009 crearon WhatsApp , una de las
aplicaciones más populares de hoy en día.
En los últimos 20 años para mantenerse en contacto se usaba
generalmente el correo electrónico. De acuerdo con la estadística , en el año 2014 el
29% de las personas revisaban sus correos al despertarse, pero ahora esta cifra
ha bajado al 22% y en vez de esto son más las personas, que revisan sus mensajes
instantáneos: siendo el 35% en el año 2016 y el 29% en el 2014.
Los programas de mensajería instantánea ahora van más allá de
WhatsApp y hay muchas compañías que han creado aplicaciones móviles para estar a
mano con sus usuarios, las 24 horas del día, y todos los días.
En Japón, Taiwán y Tailandia la mensajería más utilizada es Line , la cual fue lanzada
en 2011, a diferencia de las otras apps, no tiene emoticones, pero ofrece
stickers, que son únicos y muy populares, incluso los venden como peluches y
otros accesorios. Esta aplicación provee también otros servicios, como los
juegos en línea, que es de gusto particular en los jóvenes.
Una de las aplicaciones más recientes y que está disponible hace
casi un año (desde octubre del 2016) es Pinngle . Esta app es también
totalmente gratuita y se puede usar en todo tipos de condiciones, incluso con
Internet 2G o cuando estás conectado a un WiFi público con una señal débil, ya
que consume muy poca data. Además, por Pinngle se puede llamar a los números
celulares y fijos incluso cuando el destinatario no tiene cuenta en esta red,
utilizando el servicio de Pinngle-Out, que provee llamadas a un costo muy bajo y
competente.
Las mensajerías instantáneas atraen a las personas por la
facilidad de su uso, accesibilidad y por el poco consumo de data, es por eso que
de casi 4 mil
millones de
internautas el 80% utilizan este tipo de
aplicaciones.
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