Si Windows 7 marcó una interesante evolución para lo que habíamos conocido en
Windows Vista, Microsoft ha decidido implementar un cambio profundo en Windows
8, buscando ofrecer una nueva experiencia para los usuarios que utilizan esta
familia de sistemas operativos.
En esta nota vamos a conocer las principales novedades de Windows 8 y
analizaremos como impactarán en la manera que el usuarios utilizan Windows.
La nueva interfaz para los usuarios
Microsoft ha trabajado para implementar una renovación importante en la interfaz
de usuario de Windows. El resultado lo tendremos a simple vista desde el momento
de la instalación, y lo podremos ratificar al acceder por primera vez a Windows
8. El ingreso por defecto ya no es al escritorio de Windows, sino que tendremos
nuevas opciones.
Una vez que comenzamos a usar Windows 8 nos daremos cuenta que su interfaz está
pensada en base a las pantallas táctiles, con las cuales es compatible aunque
esto no es un requisito indispensable.
La nueva interfaz de usuario de Windows 8, que está enfocada en mosaicos
(tiles), ha sido bautizada como Metro. Esta característica se ha
transformado en una de las más difundidas de Windows 8. Probablemente quienes
hayan estado en contacto con Windows Phone podrán familiarizarse con mayor
facilidad con esta interfaz.
Hay un cambio en la lógica con la cual el usuario se desplaza dentro del entorno
Windows, ya que nos podremos desplazar hacia los costados para encontrar más
opciones. Esto ocurre tanto en interfaces táctiles, como en aquellas que
funcionan con teclado y mouse.
Si bien se destaca la nueva interfaz para acceso a información y
archivos del
disco, en la red y en la nube, también podremos ver el escritorio que conocíamos
en versiones anteriores y acceder a contenidos con un explorador.
Windows 8 puede funcionar en cualquier equipo que cumpla con los requisitos
técnicos y puede ser utilizado con teclado y mouse como ocurre con las versiones
anteriores de Windows.
En el fondo, la idea de Windows 8 es que pueda funcionar
perfectamente para usuarios que utilizan computadoras personales de escritorio,
equipos portátiles y también para aquellos que están comenzando a optar por
alternativas con interfaz táctil.
Nuevas funcionalidades
Un aspecto para valorar es la velocidad de carga inicial, que es mucho más
rápida que la de versiones anteriores de Windows.
La integración con Internet y especialmente con características de correo
electrónico y redes sociales ha sido revisada y mejorada en esta versión. La
nube cuenta con mayor protagonismo y la posibilidad de sincronizar datos y
aplicaciones con Internet está a la orden del día en esta versión.
También es importante destacar que entre las novedades que trae Windows 8 se
encuentra Internet Explorer 10, un navegador moderno que trae mejoras de
seguridad y una compatibilidad mucho más alta que su antecesor en lo que se
refiere a nuevos estándares Web, como el caso de HTML5 y ECMASCRIPT 5.
Respecto a la compatibilidad con versiones anteriores, Windows 8 puede correr
todas las aplicaciones que funcionan en Windows 7.
En cuanto a seguridad, encontraremos nuevas funciones que nos permitirán
bloquear aplicaciones sospechosas. Este aspecto es muy importante para lograr
que el equipo sea menos vulnerable ante ataques. También encontraremos en
Windows 8 novedades en la manera de ajustar nuestro nivel de privacidad.
Palabras finales
Windows 8 actualmente se encuentra en fase Beta, es decir aún no está terminado.
Sin embargo, esta versión nos permite conocer varias de las cualidades y cambios
que nos traerá esta edición del sistema operativo de Microsoft.
Visualmente el cambio es muy grande y también en lo que se refiere a la manera
en que el usuario interactúa con el sistema operativo.
Si bien esto puede ser
una ventaja para los usuarios que están acostumbrados a dispositivos táctiles o
también para aquellos amantes de las novedades, también puede ser un punto
negativo para las personas a las que les cuesta más adaptarse a los cambios.
En
definitiva la idea de esta renovación es darle un diseño más fluido y moderno a
Windows, siendo un cambio realmente importante para quienes estaban habituados a
utilizar este sistema.
A la hora de instalar Windows 8 en nuestra PC debemos saber que será necesario
contar con una computadora moderna.
En la versión de 32 bits, la más usual por
el momento, deberemos contar con 1GB de memoria RAM (2GB muy recomendados),
Tarjeta de video con DirectX9, 16 GB de espacio en disco duro y un procesador
bastante veloz (se recomienda trabajar con opciones de doble o cuádruple
núcleo).
Vale decir que para quienes opten por la versión de 64 bits, los
requisitos indican que deberán tener 20 GB de espacio en disco duro y un mínimo
de 2GB de memoria RAM (4GB sería lo recomendable en este caso).
Para finalizar, podemos mencionar que se espera que el lanzamiento de la versión
definitiva de Windows 8 se realice durante el año 2012.