Hoy en día, con el uso intensivo de
internet en las transacciones bursátiles, la competencia entre los bróker por
atraer clientes, está en alza. En consecuencia las comisiones, es decir, las
tarifas que nos cobran por comprar o vender se han reducido significativamente.
Adicionalmente, se ha reducido el capital mínimo requerido para comenzar a
operar.
En términos generales, un bróker
regulado con buena reputación, le exigirá como mínimo 5000 USD o su equivalente
en euros para abrir la cuenta. Si apenas comienza en bolsa y no se quiere
arriesgar, lo que puede realizar es la apertura de la cuenta por ese valor o por
el valor indicado y al cabo de unos días, retirar 4000 USD y dejar únicamente
como saldo los restantes 1000 USD.
Es equivocado creer que es necesario
contar con mucho dinero para invertir. Por el contrario, es necesario invertir
para obtener mucho dinero. El problema no es la falta de dinero, sino la falta
de ideas para conseguirlo.
Es sugerible comenzar con una cuenta
demo para familiarizarse. Casi todos los bróker lo ponen a disposición de los
clientes para que prueben sus estrategias por un periodo de 30 días. Igualmente,
evite convertirse en el rey de las demo y opere solo unos días en la cuenta
virtual.
Una buena estrategia en caso de no
contar con el dinero mínimo para invertir, es fijar esa cifra como una meta.
Propóngase ahorrar mes a mes cierta cantidad de dinero durante un periodo
definido de tiempo.
El siguiente paso del ahorro, es la inversión. Ese será el paso a la libertad
financiera y al éxito.
