Los cactus son plantas primitivas en constante mutación que se caracterizan por superar el paso del tiempo, de ahí la inmensa variedad de formas extrañas, vale aclarar que el término cactus viene del griego kaktós que significa "grueso, gordo, craso".
Los cactus se reconocen fácilmente por sus aureolas, esas montañitas con pelusa en la parte superior desde donde asoman los pinchos.
¿Qué mirar cuando se compra un cactus?
Hay que fijarse cuidadosamente en la parte baja del tronco para comprobar que esté sano, con buen color, y sin insectos.
¿Cómo son y cuándo salen sus flores?
La época de floración es en primavera/verano, depende de la especie. Las flores son espectaculares aunque de vida muy corta, nunca duran más de una semana.
Algunas variedades tienen flores de sólo una noche de duración, pero si han tenido un invierno muy caluroso, no florecerán.
Los cactus pertenecen a la familia de las plantas suculentas, junto con las plantas crasas, pero no deben confundirse pues tienen características que las diferencian.
Las plantas crasas en cambio no tienen pinchos, excepto algunas variedades que tienen espinas que salen directamente del cuerpo de la planta y no de una aureola.
Tanto unas como otras tienen una gran capacidad de almacenamiento de agua, y por esto soportan sequías prolongadas y calores muy intensos.
Los pinchos y la lanosidad que cubren a estas especies les sirven para protegerse del calor, ya que se limita la transpiración, y de los insectos que podrían beberse sus reservas de agua.
¿Necesitan un tipo de tierra especial?
Sí, porque conviene que tenga gran parte de arena. Se puede comprar ya preparada o mezclar en la siguiente proporción 1/3 de turba rubia, 1/3 de arena gruesa y 1/3 de carbón vegetal molido. Es importante que tenga buen drenaje.
¿Cuándo hay que cambiar de maceta?
Cuando veamos que salen demasiado las raíces, más o menos cada 2 ó 3 años. Para hacerlo, saca la planta con guantes y revisa bien las raíces, para comprobar que están sanas.
Si hubiera cochinilla, quita con cuidado la tierra, introduce las raíces en un insecticida específico, y finalmente, ponlas en el sustrato nuevo. No riegues hasta uno o dos días después, haciéndolo poco a poco.
Aprende a cultivar tu propia huerta orgánica. Inscríbete ahora en nuestro curso gratis de Huerta y jardinería orgánica haciendo clic aquí.
