La particular personalidad del hijo menor

Para saber como educar mejor al último de sus vástagos, o simplemente por curiosidad, no deje de leer la siguiente nota, donde le contamos como suelen ser estos hijos menores…

Los hijos menores tienen
muchas características distintivas. En primer lugar, suelen ser muy dependientes
de sus hermanos mayores, así como también de sus padres, pues generalmente están
sobreprotegidos por los mismos, ya que son los eternos benjamines de la familia.

 Por lo tanto, no sería
raro que esperasen mucha atención y cariño por parte de todos los miembros de la
familia, que seguramente no dudarán en dársela, al verlo siempre como un tierno
bebé… por más que ya no lo sea.

 Seguramente, cuando el
niño menor se encuentre entre un grupo de pares o directamente entre sus
hermanos, tratará de acaparar toda la atención sobre sí mismo. Y cuándo tengan
un problema, no dudarán en exigirle a cualquier persona que deje todo lo que
este haciendo para “correr” a ayudarlos o simplemente a escucharlos.

 Esta conducta, tiene
relación con el hecho de haber tenido, durante toda su vida y desde que tuvieron
uso de razón, mucha gente dispuesta ayudarlos y resolverles los problemas de
forma inmediata. Por eso, cuándo un hijo menor no obtiene lo que quiere, sea en
su carrera profesional, en una relación, o en un simple capricho, suele hacer un
gran barullo y enfadase por varios días.

 Sucede que, claro, cuando
ellos eran chicos, (y a menudo quedaban como los hijos únicos de la casa, luego
que sus hermanos la abandonasen), típicamente obtenían todo lo que deseaban, o
bien por ser “el más chico”, o bien porque no había más nadie con quien
compartir.


 En el trabajo
 

Según afirman algunos
especialistas en conducta, los hijos menores suelen ser buenos en los trabajos
en los que otros dependan de ellos, pero no así en aquellos donde estén en
relación de dependencia. Esto es así por que son personas acostumbradas a
manejarse según sus propios deseos, pero no a resistir la presión de los demás.

Además, estos hijos
menores no serían buenos en trabajos de administración, ya que son muy
dependientes de las opiniones de los demás, y por ende les costaría resolver las
cosas por sí mismo.

 Sí serían buenos, en
cambio, trabajando como intermediarios, por ejemplo como secretarios. Pueden
tener un lado creativo, pero suelen ser excesivamente críticos y les tomaría
largos períodos de tiempo poder terminar un proyecto, debido a que
constantemente buscan cambiarlo y/o revisarlo.


 En las relaciones

 En las relaciones
románticas, requerirán una gran cantidad de atención y cariño durante todo el
tiempo, ya que tienen una necesidad de ser cuidados. A menudo, esto podría
provocar que estos hijos menores se tornen demasiado dependientes de su pareja,
hasta incluso asfixiarlo.

 También, suelen necesitar
también tener mucho compromiso durante la relación. Sin esto, generalmente se
sentirán perdidos, como si no fueran la cosa más importante para la otra parte.

 Por eso, la mejor persona
para estar con un hijo menor, sería un hijo mayor, ya que estos últimos tiene un
instinto natural a cuidar a los demás. En estos casos, habrán muchas más chances
de que la relación sea exitosa, y se extienda por un largo período.