A pesar de los beneficios que concede la comida especial para perros, todavía hay familias que prefieren alimentar a sus amigos caninos con alimentos caseros.
Para poder hacerlo correctamente y no hacer que el perro corra riesgos de salud, hay que tener en cuenta lo siguiente:
La mejor dieta para tu perro
Una buena dieta debe incluir proteínas (carne de ternera, caballo o pollo), hidratos de carbono como el arroz y pasta cocida, minerales y vitaminas que se encuentran en las zanahorias y espinacas y una cantidad mínima de grasas.
Los alimentos que se deben evitar son: embutidos, carne de cerdo, frutos secos, dulces y helados.
Para alimentar a un perro mediano, solamente es necesario cocer una taza de arroz durante diez minutos y agregar trozos de la carne que se prefiera. No es necesario agregar condimentos ya que son perjudiciales.
Evitar las malas costumbres: no es bueno darle al animal las sobras de comida de las personas. “La comida humana suele tener bastante grasa y aunque en los humanos es perjudicial abusar de ella, para los perros puede ser mortal ya que se puede originar una pancreatitis, gastroenteritis, úlceras, obesidad, colitis, trastornos renales y cardíacos”, sostiene la veterinaria argentina Teresa Cardona.
Opciones de comida casera para perros
1.- Cocer un puñado de carne molida, hervir dos cucharadas de arroz y una zanahoria.
2.- Hervir un poco de pasta y acompañarla con un puñado de verduras: espinaca, patatas o zanahoria.
3.- Moler cáscara de huevo y adicionarla al plato de comida. La cáscara es muy nutritiva.
4.- Cocer una taza de hígado junto a dos tazas de copos de avena y ¼ taza de arroz integral.
Es conveniente variar los ingredientes diariamente. La carne siempre debe estar cocida antes de dársela al animal. Cada ración debe ser mediana. “Hay que ser consciente de que la obesidad es un flagelo que mejor prevenir.
Las raciones no deben ser abundantes. Un plato mediano será más que suficiente para que el animal esté satisfecho y bien alimentado. Para tener una idea, una dieta balanceada es aquella que contiene 40 por ciento de proteínas animales, 30 por ciento de harina, y 30 por ciento de vegetales”, comenta la profesional.
La comida puede mantenerse en la nevera no más de dos días. Si nunca antes se le ha dado una dieta casera al perro, lo indicado es ir mezclando la alimentación con pienso o aquella comida habitual para que el cambio no sea tan brusco.
Es mejor evitar productos lácteos ya que muchos perros no los toleran bien y su consumo puede desencadenar serios problemas de salud en la mascota.
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