Por supuesto, ante cualquier signo de enfermedad o de comportamiento poco habitual, debes llevar a tu mascota al veterinario. No obstante, existen algunas técnicas para revisar su salud a diario; cuando no hay síntomas extraños. Es algo así como un chequeo de rutina.
El chequeo del color y la calidad de las membranas mucosas de su mascota (tales como las encías), te pueden otorgar información valiosa sobre su estado de salud.
Pasos:
1. Despega el labio superior o inferior de tu mascota.
2. Observa el color de sus encías o su labio interior.
3. Busca un tono rosado.
4. Debes saber que los animales que tienen encías blancuzcas pueden estar anémicos o padeciendo algún tipo de patología nerviosa.
5. Por otra parte, las encías de color azulado pueden sugerir que tu mascota no está recibiendo la cantidad adecuada de oxígeno dentro del torrente sanguíneo. Es decir, puede que no esté respirando bien o que tenga un problema circulatorio.
6. Asimismo, las encías coloradas, de apariencia viscosa, pueden indicar problemas de salud.
7. Si posees un perro de una raza que tenga áreas sin pigmentación, asegúrate de chequearlas. Por ejemplo, el chow chow, que tiene un pigmento negro en las membranas de las encías.
8. Contáctate inmediatamente con un veterinario si tu mascota muestra cualquiera de estas anormalidades.
¡Atención!
Si eres de esas personas que aman las mascotas exóticas, recuerda que este procedimiento es recomendado sólo para gatos y perros. Desde ya, no es aconsejable que revises las encías de tu cachorro de tigre o, de tu amigable caimán (si eres de los más osados).
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