Los
animales deben ser respetados, cuidados y protegidos. En ningún caso pueden
ser tratados físicamente con crueldad y el ser humano no tiene derecho a
abandonarlo ni exterminarlo.
Si la muerte de la mascota es necesaria, ésta debe ser indolora e instantánea.
Las mascotas que viven con un ser humano tienen derecho a mantenerse sanas,
limpias y bien alimentadas. Todos estos derechos deben ser defendidos por ley.
Es importante que en un hogar donde hay una mascota, todos sus integrantes lo
traten con afecto y generosidad. “Es imprescindible que los niños aprendan a
querer a un animal, sean dulces y sensibles y no lo maltraten física ni
emocionalmente.
Los animales, sea cual sea, son seres sensibles, dependientes e indefensos.
Si son atacados se defenderán, pero tienen límites. Los humanos debemos aprender
a comprenderlos, tenerles paciencia y respetar sobre todas las cosas los
derechos de los que disponen”, destaca la veterinaria argentina Pamela
Marchesini.
El no cumplir con los derechos básicos influye negativamente en los animales.
“Las emociones de las mascotas se ven alteradas, se sienten más sensibles y
predispuestas al dolor y se aburren con mayor facilidad.
El desgano es bastante habitual en ellos y fácil de interpretar por el
humano, por eso, no hay que dejar que los animalitos se depriman y la única
manera de combatir estas sensaciones negativas es respetando y haciendo valer
sus derechos”, sostiene la profesional.
Es importante que el ser humano le otorgue a su animal todos los derechos que
éste merece y no los que él cree convenientes. “No es un tema menor y antes
de decidirse a tener un nuevo integrante de la familia en la casa hay que
analizar si se está en condiciones de brindarle las atenciones y el respeto que
se merece la mascota y no dejarse llevar por intereses ajenos o emociones
egoístas”, finaliza diciendo la experta.
Cómo cuidar los derechos de las
mascotas
1.- Si se desea adquirir o adoptar una mascota, es conveniente que antes se
analice muy bien para qué se la quiere. Los animales necesitan cuidados,
atenciones y mucho afecto.
Si una persona se siente en la capacidad de poder asumir la responsabilidad de
tener a un animal en el hogar y cubrir todas sus necesidades, no tendrá
problemas a la hora de la convivencia, pero si hay algún aspecto que no termina
de convencer o se carece de una real disposición, lo mejor es desechar la idea
de tener un animal de compañía.
2.- Los
derechos de los animales existen. Antes de decidir traer a una mascota
al hogar, es bueno informarse cada uno de ellos para asegurarse que será posible
cumplir con todos.
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