El canario doméstico que todos conocemos, es descendiente directo del canario silvestre y desde hace mucho tiempo se ha criado en los hogares en cautiverio.
Tener como compañía este ave sumamente vistosa y alegre es una gran decisión, ya que por su bonita silueta y colorido plumaje, transmite alegría con su melodioso canto e inunda el ambiente de optimismo y vitalidad.
Su cría es relativamente sencilla y lo Ideal es adquirirlo cuando es muy joven y tiene pocos meses de vida. Se puede elegir entre macho o hembra, aunque según los especialistas, el macho es el mejor cantante, por lo tanto, si se busca un compañero melodioso, conviene el macho y si se quiere lograr su reproducción, convendrá elegir una pareja.
Alimentación
Es relativamente sencilla, ya que para mantenerlo en óptimo estado se le debe proporcionar una buena mezcla de semillas, siendo la base principal el alpiste, el mijo y algo de fruta y verdura.
Debe administrarse siempre en pequeñas cantidades, por ejemplo una hoja de lechuga o un trocito de manzana un par de veces por semana, o bien algo de proteína animal como un pedazo de galleta, todos los días en período de cría.
Su pico y sus uñas no paran de crecer; para que esto les impida comer normalmente o cantar es importante suministrarle el hueso de jibia que utiliza para obtener el calcio necesario y friccionar el pico para limpiarlo y conservarlo en perfecto estado para utilizarlo a la hora de comer y de acicalarse las plumas.
También se le debería colocar en comedero aparte, el llamado "grit", que no son mas que arenillas, conchas y demás piedrecillas trituradas, utilizadas por el canario para moler el alimento y obtener así una mejor digestión.
Baño
Como la mayoría de las aves, al canario le gusta mucho el baño, que utiliza además para refrescarse cuando tiene calor y dejar el plumaje en óptimas condiciones.
Se le puede poner tanto en invierno como en verano, utilizando agua limpia y a temperatura ambiente, a la que se le puede añadir unas gotitas de vinagre para eliminar los posibles parásitos externos que pudiera tener.
Es importante renovar el agua del baño cada vez que la usa para evitar que se contamine, y como medida de precaución, hay que evitar las corrientes de aire que podrían ser fatales, y tampoco dejar el baño a su libre disposición más de diez minutos, para evitar así que ingieran el agua ya sucia.
A los canarios, con los meses, les van creciendo las delicadas uñas de las garras y es importante cortárselas ya que de no hacerlo se les cerrarían como un puño y les impediría poder aferrarse a los palos de la jaula.
Con mucha delicadeza, hay que sujetar al animalito y utilizar una tijerita fina teniendo la precaución de no dañarlo, siempre es mejor acudir al veterinario para que realice este procedimiento de modo tal de no afectar al animal.
Su espacio
Conviene elegir una jaula espaciosa para que el canario se sienta cómodo, con dos palitos para que pueda saltar de lado a lado y un saltador colgante para que se hamaque, mientras entona sus hermosas melodías.
En la jaula, debe tener su bebedero y comedero. El bebedero hay que limpiarlo a diario para que no se acumule polvo o alguna plumita, y el agua debe renovarse todos los días, la comida debe reponerse cuando va decreciendo su nivel .
Los canarios son muy ligeros de vientre, por eso manchan mucho. Para que no sea tan dificil la limpieza de la jaula, es aconsejable poner hojas de periódico en la bandeja del fondo, así, al retirarlas, se tiran directamente a la basura y la bandeja queda limpia al instante.
Otra cosa es la separación, donde los barrotes acumulan excrementos del animal, eso lo limpiaremos con una espátula rascando bajo el agua de la canilla un par de veces por semana por razones higiénicas.
También es importante liberarlo de piojos que pueden surgir entre el pelaje del animal con sprays específicos que se venden en veterinarias especializadas, simplemente se apunta a medio metro de la jaula y se rocía el espacio de toda la jaula.
Los canarios son adoradores del sol y suelen cantar mucho cuando sus rayos los iluminan, sin embargo, hay que tener la precaución de que no les den directamente ya que podrían insolarse.
Son aves muy inteligentes capaces de establecer vínculos con su dueño y mantener con ellos un diálogo a través de sus sonidos y sus alegres melodias.
