El sólo hecho de olfatear una planta puede producir en perros y gatos
irritaciones o alergias. Si son ingeridas, las consecuencias pueden ser mucho
más graves.
Los trastornos que ocurren con más asiduidad por consumir una
planta tóxica
son
vómitos, diarrea e incluso la muerte. La toxicidad puede hallarse en los tallos,
las hojas, los frutos o las flores.
Cómo evitar que los perros se acerquen a las plantas peligrosas
“Hay conductas que predisponen a que el animal se acerque a lo prohibido. En
general, se relacionan con el hambre y el aburrimiento. Si la mascota no tiene
agua o comida, lo más natural es que comience a husmear por entre las plantas
hasta llegar a dar con un fruto o una hoja de sabor dulce o que lo atrae.
Un modo de evitar este comportamiento es atender correctamente al animal.
Brindarle siempre agua y alimento cuando sea necesario”,
sostiene el veterinario español Joseph García Abat.
Otro de los motivos es el pasar mucho tiempo solo ya que la falta de actividad
hace que la mascota empiece a andar en busca de algo que le llame la atención.
“El perro, el conejo o el gato comenzarán a morder todo lo que encuentren en el
camino a modo de distracción sin advertir el peligro que pueda existir”,
sostiene el profesional.
La ansiedad es otro de los problemas que se asocian a que la mascota actúe de
una manera indeseada. “El cambio de hogar, la falta de espacio y los malos
tratos son motivos suficientes para que el animal quiera llenar un vacío que
evidentemente tiene.
Destroza todo lo que encuentra a su alrededor y busca la manera de
entretenerse o llamar la atención comiendo las plantas y desorganizando los
jardines o los espacios a los que tiene acceso”, destaca el especialista.
¿Cuáles son las plantas nocivas para los animales?
1.- Laurel rosa: todas sus partes son peligrosas. Los síntomas más evidentes de
una intoxicación son vómitos, dolor gastrointestinal, diarrea, fiebre,
taquicardia, dificultad respiratoria, debilidad general, paro cardíaco y muerte.
2.- Ciclamen: la sustancia que contienen estas plantas provocan fuertes
diarreas, malestar general, convulsiones, parálisis e insuficiencia renal.
3.- Alas de ángel: tras la ingestión de cualquiera de las partes de esta planta
se siente un ardor intenso en la boca, hinchazón de la lengua, cuello, estómago
e intestinos.
4.- Acebo: sus frutos y hojas contienen veneno. Con tan sólo ingerir uno de sus
frutos, se sentirá somnolencia, malestar general, deshidratación y también puede
llegar a ocasionarse la muerte de la mascota.
5.- Flor de Pascua: su ingesta puede provocar dermatitis, aparición de ampollas
y graves trastornos oculares.
6.- Hiedra: el contacto con esta planta puede provocar dermatitis, erupciones y
úlceras. En casos severos, se pueden originar vómitos, bradicardia, asfixia
hasta desencadenar la muerte del animal.
7.- Lirio: tras la ingestión se puede provocar hipertensión arterial, dolor
abdominal y diarreas.
8.- Hortensia: Su ingesta puede provocar falta de coordinación, trastornos
gastrointestinales y dolor abdominal.
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