Cuando un gato muestra un
comportamiento agresivo, es importante descubrir
cuales son sus razones. Es posible que el gato esté sintiéndose en peligro, o
bien protegiendo su territorio, por lo que debe estar preparado para la
posibilidad de que, instintivamente, el animal lo rasguñe o lo muerda.
Sin
embargo, cuando el animal manifieste esté comportamiento sin ninguna razón
evidente, será necesario averiguar otras cuestiones, para comenzar algún tipo de
tratamiento.
Existen varias razones por las que un gato podría exhibir, repentinamente, un
comportamiento agresivo. En todos los casos, será importante que su gato sea
examinado por un veterinario. Una de las causas, podría ser que el animal se
encuentre herido o enfermo.
Tomar con las manos a un gato herido, podría causar
al animal un dolor tan intenso que, instintivamente, agrediría a la persona en
cuestión. Por lo tanto, visitar a un veterinario será el primer paso que usted
deberá tomar, para evaluar las causas de este nuevo comportamiento.
En
algunos casos, simplemente es el aburrimiento mismo la causa de su agresividad.
Los gatos que viven en el interior de una casa, deben encontrar algo que les
permita descargar toda la energía con la que cuentan. De no hacerlo, toda este
vigor se manifestará en un comportamiento agresivo. Asegúrese de que su gato
posea varios juguetes con los que pasar sus horas en diversión.
Usted también
debe pasar un cierto rato de tiempo jugando con el gato. Una forma de hacerlo,
es mostrándole un cordón, el cual el gato intentará tomar hasta agotarse. En
todos los casos, nunca utilice sus manos para jugar con su gato, ya que esto les
puede dar un permiso para morder o rasguñar a la gente, exactamente lo que
estamos intentando evitar.
A
veces, traer a casa un nuevo amigo, es la mejor solución para todos. Los gatos
son animales sociales, y aunque en un principio pueden no adaptarse a los
cambios, tarde o temprano disfrutaran mucho de las nuevas compañías.
Así,
encontrará que los gatos utilizan la mayor parte de su energía para jugar
"juegos de gatos", el uno con el otro. Esto no significa que pueda olvidarse de
ellos: siempre será importante que se les preste atención, para que no se
conviertan en animales ariscos con las personas.
Si
no ha encontrado ningún problema de salud, y ha hecho todos los esfuerzos para
entretener al gato, podría llegar a ser necesario un nuevo adiestramiento. Como
punto básico, se debe incluir el reprender siempre al gato cuando éste lo muerda
o rasguñe. Esto no quiere decir que deba pegarle: alcanzará con un firme "¡no!",
y con un golpecito en la nariz.
Algunos dueños, animan a sus gatos a mantener este comportamiento agresivo, sin
siquiera saberlo. Instintivamente, nosotros separamos nuestras mano cuando un
gato nos las muerde o rasguña.
Pero los animales, pueden ver a esto como un
estímulo, una parte del juego. Por lo tanto, lo ideal es que tratemos de no
mover mucho las manos, y digamos firmemente "¡no!" hasta que el gato lo
entienda. El animal pronto aprenderá que no recibirá ninguna atención si actúa
agresivamente.
Otra táctica, puede incluir la distracción de su agresividad. Algunas personas,
mantienen consigo una botella de agua a mano, y le arrojan al gato un pequeño
chorrito cuando estos comienza a morder o rasguñar. Otros, tienen a mano un
pequeño juguete disponible, y lo lanzan para desviar la atención del gato,
cuando este se pone agresivo.
Finalmente, tenga en cuenta que así como los seres humanos pueden tener
desequilibrios químicos, los animales también pueden padecerlos.
Si todas estas
alternativas han fallado, concierte otra cita con el veterinario. Los casos
extremos de agresividad, pueden necesitar a veces de ser tratados con una
medicación sedante. Sin embargo, esta debe ser la última de las alternativas, y
bajo ningún punto una opción tomada con ligereza.
Tener un animal doméstico, es
una gran responsabilidad, ya que ellos podrán hacer cosas que nos disgusten,
pero ello no significa que nosotros debamos optar por el arreglo más fácil,
rápido, o inmediato. Por lo tanto, siempre se deberán tomar en cuenta las
primeras alternativas señaladas, antes que ésta última. Tenga en cuenta que es
por el bien de su animal.