Degeneración macular relacionada con la edad

Síntomas, diagnóstico y tratamiento uno de las causas más frecuente de pérdida de la visión después de los 60 años

Definición

La degeneración macular
relacionada con la edad es una enfermedad que afecta la visión central. Es una
causa común de pérdida de visión en las personas mayores de 60 años de edad.
Debido a que solamente suele afectar el centro de la vista, no es común que
cause ceguera. Sin embargo, la degeneración macular a veces puede hacer que sea
difícil leer, conducir o realizar otras tareas diarias para las que hace falta
el detalle de la visión central.

La mácula

La mácula está en el
centro de la retina, que es el tejido sensible a la luz situado en el
fondo del ojo. Cuando leemos, la luz se concentra en la mácula. De allí,
millones de células convierten la luz en señales que son enviadas al cerebro
para informarle sobre lo que vemos. Éste es el proceso de la visión central.
La visión central permite que podamos leer, conducir y realizar otras actividades
que requieren ver directamente de frente con claridad y detalle.

Forma en que afecta la vista

Hay dos tipos de
degeneración macular relacionada con la edad:

  • Seca. Este tipo afecta al 90 por ciento de las
    personas con esta enfermedad. Las células sensibles a la luz de la mácula
    se van deteriorando. Con el paso del tiempo se deteriora la mácula y la
    persona comienza a perder la visión central en el ojo afectado. Al
    comienzo, el tipo seco suele presentarse en un sólo ojo. Luego puede
    afectar el otro ojo. Los médicos no pueden predecir la enfermedad ni saber
    si afectará ambos ojos.
  • Húmeda. Aunque este tipo se presenta sólo en el 10
    por ciento de las personas con degeneración macular, causa la ceguera en
    el 90 por ciento de los casos. Ocurre cuando brotan nuevos vasos
    sanguíneos detrás de la mácula. Estos nuevos vasos sanguíneos tienden a
    ser muy frágiles y pierden sangre y líquido que se deposita detrás de la
    mácula. Esto daña la mácula de forma rápida y, en muy poco tiempo, puede
    causar pérdida de visión central.

Factores de riesgo

Si bien la degeneración
macular puede presentarse en personas de mediana edad, el riesgo aumenta con el
paso de los años. Un estudio halló que el riesgo para las personas de mediana
edad es de alrededor del 2 por ciento mientras que para las personas mayores de
75 años el riesgo aumenta a casi el 30 por ciento. Además de la edad, existen
otros factores de riesgo:

  • Sexo: Según algunos estudios, el riesgo de tener
    esta enfermedad es mayor para las mujeres que para los hombres.
  • Fumar: Puede aumentar el riesgo.
  • Antecedentes
    familiares:
    Las
    personas con algún miembro de la familia que tiene degeneración macular
    relacionada con la edad corren mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
  • Colesterol: Es probable que para las personas con un
    nivel de colesterol alto el riesgo de tener el tipo húmedo de la
    enfermedad sea mayor.

Síntomas

Ninguno de los dos tipos
de degeneración macular (seca y húmeda) causa dolor. La señal más común del
tipo seco es la visión borrosa. Es posible que la persona necesite más luz para
leer y realizar otras tareas. También es probable que no pueda reconocer los
rostros de la gente a menos que estén muy cerca.

Es posible que a medida
que empeora el tipo seco de la enfermedad, la persona note un punto ciego en el
centro de la visión. Esto ocurre porque las células de la mácula se han
deteriorado y no funcionan correctamente. Con el tiempo, la parte borrosa del
centro de la visión crece y se vuelve más oscura, afectando más su visión
central.

Las personas que tienen
el tipo seco de la degeneración macular relacionada con la edad no suelen notar
cambios en la visión. Como pueden ver bien con un ojo, siguen conduciendo,
leyendo y viendo el detalle de los objetos. Algunas personas sólo se dan cuenta
de la enfermedad cuando ya la tienen en ambos ojos.

Uno de los primeros
síntomas del tipo húmedo de la degeneración macular relacionada con la edad es
que las líneas rectas se ven onduladas. Esto se debe a que el líquido que
pierden los vasos sanguíneos se acumula debajo de la mácula y la eleva, con lo
cual la visión se distorsiona. Otra señal del tipo húmedo es la pérdida
repentina de la visión central. Esta es una diferencia con respecto al tipo
seco que ocurre lentamente. Al igual que sucede en el tipo seco, tal vez note
que aparece un punto ciego en la visión.

Si nota algún cambio en
su vista, consulte al oculista de inmediato y pida un examen de los ojos.

Detección

El oculista puede
detectar la degeneración macular relacionada con la edad mediante un examen de
los ojos que incluya:

Examen de agudeza visual:
En este examen se usa una tabla optométrica para evaluar cómo vea distancias
varias.

Dilatación de las
pupilas:
Dilatar las pupilas permite al oculista ver mejor
la retina y buscar signos de degeneración macular relacionada con la edad. Para
dilatar las pupilas se ponen unas gotas en los ojos que agrandan las pupilas.
Es probable que después del examen, su visión quede borrosa por unas horas.

Uno de los signos comunes
que se detectan al comienzo de la degeneración macular relacionada con la edad
es la presencia de drusas. Las drusas son pequeñas acumulaciones
amarillas en la retina. El oculista las puede detectar durante el examen de los
ojos. Las drusas por sí solas no son señal de enfermedad, pero pueden indicar
que hay peligro de que desarrolle degeneración macular grave relacionada con la
edad.

El oculista puede hacerle
también una prueba de Amsler. Se le pedirá que se cubra un ojo y fije la
vista en el punto negro situado en el centro del diagrama que forma una
cuadrícula. Es posible que mientras observa el punto las líneas rectas le
parezcan onduladas. Tal vez falten algunas de las líneas. De ser éste el caso,
éstos son signos del tipo húmedo de la enfermedad.

Si el oculista sospecha
que usted tiene el tipo húmedo de la degeneración macular relacionada con la
edad, puede hacerle un examen que se conoce como angiografía fluoresceínica.
Para este examen se inyecta una tinta especial en una vena del brazo y luego se
toman fotografías cuando la tinta pasa por los vasos sanguíneos de la retina.
Estas fotos ayudan al oculista a detectar los vasos sanguíneos que pierden
líquido y a determinar si pueden tratarse.

Tratamiento

El tipo seco de la
degeneración macular relacionada con la edad no se puede tratar. Sin embargo,
esto no significa que deba perder la vista. Por suerte, el tipo seco de la
enfermedad avanza muy lentamente. Es posible que pierda algo de la visión
central a lo largo de los años. Pero las personas suelen llevar una vida normal
y activa, en especial cuando la enfermedad afecta un sólo ojo.

Es posible tratar algunos
casos del tipo húmedo de la enfermedad con cirugía de rayos láser. Para ello se
aplica un rayo de luz de alta intensidad directamente sobre los vasos
sanguíneos afectados. Este tratamiento es más eficaz cuando los vasos
sanguíneos que brotan en el ojo están lejos de la fovea, la parte
central de la mácula. Sin embargo, el tratamiento con rayos láser puede ser
útil para prevenir una mayor pérdida de la visión, aunque los vasos sanguíneos
broten detrás de la fovea.

Cirugía con rayos láser

La cirugía con rayos
láser puede hacerse en el consultorio del médico o en una clínica
oftalmológica. Antes de la operación, el médico hará dos cosas: 1) dilatará las
pupilas y 2) pondrá gotas en los ojos para que no sienta dolor. También puede
adormecer la parte posterior del ojo para evitar molestias.

Las luces de la
habitación serán muy débiles. Usted se sentará frente a la máquina de láser y
el médico le pondrá una lente especial delante del ojo. Tal vez vea una luz que
se enciende y se apaga rápidamente.

Después de la operación
podrá regresar a su casa, pero necesitará que alguien lo lleve. Las pupilas
quedarán dilatadas por varias horas, así que recuerde llevar anteojos para el
sol.

Es posible que su visión
sea algo borrosa durante el resto del día. Tal vez sienta algo de dolor en el
ojo. El médico puede recetarle medicamentos para calmar el dolor.

Será necesario que vaya a
varias consultas de seguimiento. Es posible que en cada examen, el médico haga
una angiografía fluoresceínica para asegurarse de que los vasos no siguen
perdiendo líquido y que no han vuelto a brotar nuevos vasos sanguíneos. Si los
vasos sanguíneos siguen perdiendo líquido, tal vez necesite otra operación con
rayos láser. Es importante recordar que la cirugía con rayos láser no es una
forma de curar la degeneración macular relacionada con la edad. Es sólo un
tratamiento para ayudar a prevenir una pérdida mayor de la visión. El riesgo de
que vuelvan a brotar nuevos vasos sanguíneos después del tratamiento con rayos
láser es relativamente alto.

Investigación científica

Se ha sugerido que
determinadas vitaminas y minerales tal vez ayuden en el tratamiento de la
degeneración macular relacionada con la edad. El estudio del NEI sobre trastornos
de la vista relacionados con la edad (Age-Related Eye Disease Study, AREDS)
busca obtener información concreta sobre el efecto de las vitaminas y
complementos minerales.

Los científicos han
comenzado a estudiar la posibilidad de transplantar células sanas a una retina
que ha sido afectada por alguna enfermedad. Esta labor aún se encuentra en
etapa experimental, pero es posible que algún día pueda ayudar a las personas a
conservar o a recuperar algo de la visión perdida.

Proteja su visión

Degeneración macular
relacionada con la edad–Tipo seco.
Si tiene el tipo seco de
la enfermedad, debe hacerse un examen de los ojos con las pupilas dilatadas por
lo menos una vez al año. De este modo el oculista puede vigilar su situación y
controlar otros trastornos de la vista.

Pida al oculista un
diagrama de Amsler (Amsler grid) para usar en su casa. Pídale que le
muestre cómo usarlo correctamente. Esta es una forma rápida y de bajo costo
para observar cambios en su vista que le permite notar signos del tipo húmedo
de la enfermedad. Esta prueba funciona mejor para las personas que aún tienen
una buena visión central. Debe controlar cada ojo por separado. Cúbrase un ojo
con la mano y mire el diagrama, luego cúbrase el otro ojo y mire el diagrama.
Tal vez también quiera controlar su vista leyendo el periódico, viendo
televisión o sencillamente, mirando los rostros de la gente. Si nota algún
cambio, pida un examen de la vista.

Degeneración macular
relacionada con la edad–Tipo húmedo.
Si tiene el tipo húmedo
de la enfermedad, es importante que no demore en hacerse la cirugía con rayos
láser si la recomienda el oculista. Después de la operación, hará falta que se
haga exámenes de la vista con frecuencia para detectar vasos sanguíneos que
pierden líquido. Según los estudios, el riesgo de que esto ocurra es mayor para
las personas que fuman. Además, debe seguir controlando su vista como se indica
arriba (en su casa, usando el diagrama de Amsler o de otras formas) y pedir un
examen de la vista si nota algún cambio.

Si ya ha perdido parte de su visión a
causa de la degeneración macular relacionada con la edad

El uso normal de los ojos
no causa más daño a la vista. Aunque haya perdido parte de su visión debido a
la degeneración macular relacionada con la edad, no tenga miedo de leer, ver
televisión y realizar otras tareas diarias.

Existen ayudas de baja
visión que puede utilizar para aprovechar la vista que le queda. Hay lentes
especiales o aparatos electrónicos que agrandan las imágenes. Si necesita
ayudas de baja visión, el oculista podrá recetarlos o lo podrá enviar a un
especialista en baja visión. También es posible comunicarse con grupos y
lugares que ofrecen información sobre asesoramiento, capacitación y otros
servicios especiales. Otros lugares que quizás también ofrezcan información son
las escuelas de medicina o de optometría y las organizaciones que ayudan a las
personas con impedimentos visuales.

Fuente:
NEI (USA)