Es una enfermedad parasitaria producida por el Toxoplasma gondii, un parásito que el gato se encarga de hospedar.
Estos animales adquieren el Toxoplasma al alimentarse con carne infestada. Luego, eliminan oocitos con las heces y estos pasan al ganado o a las personas.
En los humanos se debe diferenciar entre la infestacion producida por Toxoplasma y la enfermedad que este puede llegar a producir, ya que en la mayoría de los casos no se llegan a presentar manifestaciones clínicas.
En un individuo con un buen estado inmunitario se puede padecer un cuadro leve con fiebre baja, inflamación de ganglios, debilidad y dolor muscular.
En individuos inmunodeprimidos, la enfermedad es grave y puede afectar a cualquier órgano pero con predilección al Sistema Nervioso Central produciendo encefalitis, meningitis e incluso puede ser mortal.
La infección en una mujer embarazada puede ocasionar una Toxoplasmosis congénita en el recién nacido. Las madres que ya estaban infestadas antes de la concepción están inmunizadas y el feto no sufre infección.
Hay dos formas de que el hombre se infeste por Toxoplasma: por ingestión directa de ooquistes procedentes de un gato infestado o por ingestión de carne infestada y mal cocida.
Para evitar el riesgo de infestación se debe cocinar la carne (los ooquistes se destruyen a los 20 minutos a 66°C), deben usarse guantes al manipular carne cruda para comer y deben asearse las manos tras la manipulación.
En lo que respecta a los gatos, se debe evitar que consuman carne cruda, no se debe permitir que cacen ni que ingieran sus presas, y se debe limpiar diariamenteel lugar donde defeca la mascota.
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