Selenio
Aún
no hay ningún estudio que haya probado los efectos del selenio en la extensión
de la vida, pero estudios recientes, que examinaban la toxicidad de este y otros
minerales, demostraron, por casualidad, que alargó la vida de los ratones. En
docenas de estos animales se demostró que el selenio podría ayudar a prevenir
algunos tipos de cánceres y que también podría ser útil en el tratamiento de
esta enfermedad.
De
todos modos, es imprescindible consultar primero con el médico antes de tomar
selenio, sobre todo porque las dosis excesivas son tóxicas.
Procaína
(GH3 And KH3)
Las
dos drogas más populares en todo el mundo contra del envejecimiento son el
Gerovital-H3 de Rumania (GH3) y el KH3 de Alemania. El ingrediente activo en
ambas drogas es la procaína, que también se encuentra en anestésicos como la
novocaína.
Los
beneficios de la procaína fueron probados por primera vez por la psiquiatra
rumana Ana Aslan, que aseguró que la fórmula GH3 podría ser utilizada en
enfermedades de la vejez. Estudios posteriores en Europa y en los Estados Unidos
con GH3 y KH3 mostraron que estas drogas eran efectivas como antidepresivos, y
también para tratamiento de la artritis.
Un
estudio realizado con animales por Aslan demostró que la GH3 extiende la vida
útil en ratas de laboratorios en un 20 por ciento. Otro estudio más pequeño,
utilizando dosis más altas de GH3, no ha podido probar que prolonguen la vida.
Centrofenoxina
La
centrofenoxina ha extendido la vida de animales de laboratorio, según un estudio, quizás por
la acción de su componente activo (dimethylaminoethanol – DMAE). Además
demostró ser efectivo en el tratamiento de trastornos neurológicos
relacionados con la vejez, y redujo la acumulación de pigmentos en neuronas y células
musculares y cutáneas.
Los
estudios realizados en humanos demostraron que la centrofenoxina puede mejorar
también la capacidad de aprender y memorizar.
DMAE
En
tres estudios, la droga DMAE extendió la vida de ratas en un 49,5 por ciento,
cuando les fue suministraron en el agua que bebían.
A
principios de los 80’s, los laboratorios fabricantes de DMAE, decidieron sacar
de circulación la droga por las bajas ventas a causa de que tenía aprobación
de la FDA solo como tratamiento para combatir la hiperactividad en los niños.
Más
tarde, una versión similar, también vendida bajo en nombre de DMAE, se comenzó
a comercializar como suplemento dietario. La combinación del DMAE y la hierba
gingko biloba se ha vuelto muy popular para mejorar el rendimiento
cognoscitivo.
Aminoguanidina
La
glucosilación es la unión patológica de glucosa con un aminoácido, y resulta
en la formación de una estructura no funcional en el organismo. Las personas
diabéticas sufren una acelerada glucosilación y varias de las enfermedades
degenerativas comunes en la diabetes de Tipo I y II se atribuyen a este proceso.
Al envejecer un organismo, la glucosilación juega también un papel importante
en la génesis de las enfermedades vinculadas a la edad. Algunos especialistas
piensan que la glucosilación es uno de los mayores responsables de las
enfermedades degenerativas de las arterias, los ojos y el cerebro.
El daño oxidativo es parte del proceso de glucosilación, y eso explica por qué
los antioxidantes para ser útiles para prevenir las patologías asociadas con
la diabetes.
Sin
embargo, se necesita una dosis mucho mayor de antioxidantes para bloquear la
glucosilación relacionada con la edad.
Uno
de los agentes con supuesta acción antiglucosilante es la aminoguanidina, pero
la FDA ha prevenido en repetidas oportunidades sobre la toxicidad de este
compuesto.
Por
lo tanto, y pese a que quienes sugieren el uso de aminoguanidina dicen saber cuáles
son las dosis tóxicas, y cuáles las dosis clínicamente efectivas y que no
conllevan riesgos, siempre es mejor consultar primero con un profesional sin
“intereses creados” con respecto a esta droga.