Uno
de los principales inconvenientes, es saber si la calidad que se ve reflejada en
su monitor, es la que tiene en realidad la joya que se va a comprar. En realidad
eso es imposible, por lo cual usted deberá asegurarse el reembolso en caso de
no obtener la pieza prometida.
Antes
de efectuar la compra, analice el origen de la misma. Si el sitio que vende este
tipo de joyas tiene una reputación, si pertenece a algún grupo o sociedad de
joyeros, cuánto tiempo lleva en ella o si tiene alguna recomendación de algún
conocido.
Sin
una factura que destaque las propiedades de la joya, como por ejemplo el color,
el corte, la claridad y los quilates de un diamante, usted tiene pocos recursos
para reclamar si se encuentra con algo que no era lo prometido.
Si la inversión es grande, asegúrese enviando un reporte al Instituto de Gemológico
Americano, en donde podrán informarlo con un mapa de la piedra en cuestión,
que le servirá para un futuro reclamo o bien para asegurar la pieza.
Otras
formas de asegurarse
Hacer
una tasación independiente:
No acepte sólo opiniones de vendedores interesados en el negocio. Existen
numerosas sociedades especiales en donde podrán asesorarlo sobre el tema.
autenticidad: asegúrese
de que la pieza que vaya a adquirir, sea de la procedencia que se indica y no
sea una reproducción hecha en China el año pasado.
Treinta
días de garantía: Asegúrese de que el periodo de devolución no sea menor
a ese plazo.
Relojes
auténticos: Si compra un reloj de bolsillo antiguo, solicite la certificación
de autenticidad y los papeles de propiedad. De otro modo podría dificultarse la
exportación a través de la aduana.