Cada vez más se busca la igualdad entre los sexos y la moda no es un tema que
quede aislado de esta necesidad. “Hoy en día existe una mayor democracia en
cuanto al
vestuario y está bien que así sea ya que en cuanto a moda se refiere
puede haber lugar para todos y todas”, sugiere el diseñador español Fernando Saer Pino.
La corbata puede llevarse tanto para conseguir un look de ejecutiva o informal.
“Nada más sensual que una mujer que viste traje y que lo complementa con una
corbata floja que cae por el escote.
Se combinan con multitud de prendas”, comenta el profesional español.
Características importantes de las corbatas femeninas
“La corbata femenina
es diferente a la del hombre. No vale quitarle este
accesorio a nuestra pareja, sino que hay que tener en cuenta este detalle ya que
el largo es lo que marca la barrera del buen gusto de una equivocación extrema.
El ancho de la corbata también es diferente ya que es mucho más angosta que
la de los hombres”, explica el profesional. Las variantes más sugerentes son
aquellas que son floreadas, satinadas y de tonos pasteles con algún detalle que
describa la personalidad de la mujer.
También se utilizan mucho las corbatas que tienen dibujos de diversos personajes
o artistas. Para la noche, el look se transforma completamente y se le da paso
al brillo. “Nada como el glamour que ofrece una corbata con brillos o
pequeños detalles en pedrería.
También hay considerar aquellas que contienen perlas o lentejuelas. Este
complemento es ideal para captar la atención de todos ya que aún no es habitual
lucirlo, pero da un toque sumamente sensual y con él se consigue un efecto
sumamente atractivo y distinto a todo lo conocido”, destaca el diseñador.
La corbata se adapta a diversas prendas. “Lo más tradicional es llevarla un
poco suelta al cuello, pero no necesariamente debe colocarse una camisa por
debajo ya que luce fenomenal con vestidos, camisetas de tirantes o de mangas
cortas o blusas.
Otro modelo de corbata es aquella que se adapta a todo el contorno del escote
sin necesidad de ajustarse al cuello o al centro de la prenda. Las variantes son
muchas, solamente es necesario tener un poco de imaginación y animarse a jugar
con las posibilidades que ofrece este accesorio tan multifacético”, sugiere
Saer Pino.
La corbata para mujer se puede utilizar tanto para ir al trabajo o para lucir de
modo diario. “Lo bueno de este complemento es que se adapta muy bien a todo
tipo de situación y edad.
Gracias a él es posible armar varios conjuntos posibles y siempre utilizando
la misma corbata. Hay que animarse a cambiar un poco el look y enriquecer así
cada vez más el vestuario femenino”, finaliza diciendo el experto.
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