Esta
es la advertencia que acaba de ser formulada por la Red
de Asma y Alergia-Madres de Asmáticos (AAN-MA) de los Estados
Unidos.
Esta organización afirma que ataques asmáticos severos pueden ser
desencadenados, aún en quienes tienen un trastorno leve o moderado, por
elementos festivos comunes como arbolitos de Navidad, las tortas de la abuela,
latkes de papa, jabones aromáticos, perfumes y mascotas. También hay que tener
en cuenta a los irritantes ambientales como el humo de cigarrillo y, en climas
fríos, el aire fresco y seco.
Todos
estos “disparadores”, frecuentes en la temporada festiva, pueden hacer que
los síntomas del asma progresen con rapidez y sin aviso previo, haciendo
necesario un tratamiento de urgencia o, incluso, una internación.
Los
Doce Disparadores Navideños son:
– El
arbolito y las guirnaldas (vegetales) de Navidad
– Ositos y otros muñecos con relleno
– Perritos y gatitos
– Almohadas y cojines de plumas
– Jabones y velas aromáticas
– Perfume
– Flores secas y
eucalipto
– Plantas y flores
– Humo de leña
– Humo de cigarrillo
– Comidas festivas (como las que contienen maní y otras frutas secas, y
productos lácteos)
– Joyas y bijouterie que contenga níquel.
Más
información en el sitio Web de la organización:
www.aanma.org