Aunque
el corpiño ha sido muy popular por casi 80 años, los expertos de la industria
estiman que el 75 % u 80 % de todas las mujeres, usan un tamaño equivocado. El
embarazo, los cambios de peso, (¿se atreve a aceparlo?)modifican con el tiempo
los tamaños, por lo que la mujer media usará seis diferentes talles de corpiño
durante el trascurso de su vida.
Muchas
mujeres, tienden a comprar el corpiño del tamaño que desearían tener, y no
del tamaño que necesita. No caiga en esta trampa.
¿A quién le importa qué
tamaño es, si le va a quedar bien? Dígale a sus compañeros que utiliza el
talle que usted desearía, ya que total… nunca verán la etiqueta interior del
corpiño, si no que solo apreciarán los resultados externos.
Dicho
esto, le damos algunos consejos para que pueda elegir el corpiño adecuado:
1.
El elástico que pasa alrededor de su cuerpo, debe ser firme pero cómodo. Usted
debería poder insertar un dedo debajo de él. Si es demasiado apretado,
necesitará un tamaño más grande o un gancho más extenso.
2.
Las partes traseras y delanteras del corpiño, deben estar paralelas al piso o
levemente caídas. El borde más bajo del elástico debe pasar por la caída de
los hombros.
3.
El panel central debe acostarse contra el esternón, sin formar “arcos” con
el cuerpo. Si lo hace, es por que el tamaño de las tazas es demasiado pequeño,
o el panel no es lo suficientemente grande como para acomodarse a la separación
de sus pechos.
4.
Debe tener un contorno liso, sin que entre las tazas y los pechos quede aire, o
estas se arruguen.
5.
Debe sostener el peso de sus pechos, principalmente con el elástico inferior y
las tazas, y no con los elásticos que pasan por el hombro.
6.
El busto debe haber quedado, luego de puesto el corpiño, a mitad de camino
entre la parte superior del hombro y de la curva del codo, para crear una
silueta de proporciones equilibradas.
Si su
corpiño no le cabe correctamente, es muy probablemente que usted no haya
escogido el tamaño adecuado. Pero con solo detenerse unos minutos para seguir
estos consejos, podrá verse más delgada, armonizada… ¡y sin necesidad de ir
la gimnasio!
