compulsivamente
el desarrollo de muchas enfermedades
Hay personas que durante el año llevan una vida sedentaria y con la llegada
de las temperaturas elevadas y la vestimenta liviana sienten el deseo o la
necesidad de hacer alguna actividad que permita disfrutar las bondades del
clima, en el primer caso, o bajar algunos kilitos de más, en el segundo.
Aquí
una guía de las actividades que se pueden realizar. Sus pros y contras.
Caminar:
es recomendable para quienes
tuvieron un año sin actividad física, es de impacto bajo y por lo tanto no hay
restricciones de edad. Se debe desarrollar con intensidad regulada y con paso
constante durante al menos media hora.
Mejora la capacidad aeróbica, tonifica
las piernas, alivia las contracciones y elimina tensiones. Se recomiendan las
zapatillas acolchadas, las superficies blandas (pasto) y complementar con
ejercicios de elongación.
Natación:
ideal para las personas con
problemas de articulaciones y huesos, que no pueden realizar actividades de alto
impacto. No tiene limite de edad y pone en funcionamiento todos los grupos
musculares, por eso es uno de los deportes más completos.
Correr:
también moviliza todos los
grupos musculares
y es una actividad de impacto, se debe revisar previamente el
estado de las rodillas, tobillos y caderas.
Sobre todo si hay sobrepeso de más
de tres kilos. Se recomiendan las superficies blandas y un calzado que tenga el
talón alto. En los primeros minutos se pierde agua e hidratos de carbono y
luego de media hora se quema grasa.
Tenis:
es divertido y ayuda a
quemar grasas, se necesita una buena preparación física ya que implica
trabajos anaeróbicos (los músculos trabajan sin oxígeno).
No es bueno
practicarlo sólo los fines de semana si no se combina con actividad durante el
resto de los días. Hay momentos en los que el pulso llega a 170 y debe bajar rápidamente,
si no hay continuidad se corre peligro de que no baje.
Se desaconseja para
personas con problemas cardíacos, artrosis de cadera, pie plano y con problemas
en rodillas o codos.
Ciclismo: es una actividad aeróbica sin impacto, fortalece piernas y glúteos. Se
desaconseja a personas con problemas cardíacos, de caderas y rodillas.
Es
importante que las piernas tengan la debida extensión. Para bicicletas de paseo
se debe realizar de una hora a una hora y media por vez, en el caso de las fijas
con treinta a cuarenta minutos alcanza.
Golf: combinado con marcha ayuda a adquirir resistencia y una excelente
actividad cardiovascular. Pero implica un movimiento de torsión antinatural. No
es aconsejable para quienes tengan dolencias en la cintura, espalda y rodillas. Es
un buen recurso antiestrés y fortifica piernas, caderas, hombros, glúteos y espalda.
Fútbol: es una buena opción, pero
también una de las menos recomendables para los principiantes. Lo deben practicar
aquellos que incluyen la actividad física en sus rutinas desde hace algún
tiempo. Las articulaciones más expuestas son las rodillas y los tobillos.
En
todos los casos , la frecuencia ideal para realizar actividad física es dos o
tres veces por semana y es contraproducente sobreexigirse en poco tiempo para
recuperar el tiempo perdido. Lo mejor es mantener el nivel de actividad durante
todo el año.
¿Te
han dicho que debes dejar de fumar, pero no sabes cómo lograrlo?
Comienza por nuestro curso gratis para Dejar de fumar.
Inscríbete ahora haciendo clic
aquí.