El polvo, la tierra, las
pelusas, y el polen que a diario sufren los muebles que se encuentran en el
patio o jardín de su casa, no son nada gratuitos para ellos, y de hechos podrían
hacerlos arruinar en poco tiempo.
Por eso, sin importar que
clase de muebles posea, será muy necesario que les dispense un cuidado apropiado
y especial, para ayudarlos a mantenerse en buen estado, así como también para
extender su vida útil, lo que sin dudas le hará ahorrar una buena proporción de
dinero.
Para ello, aquí le
ofrecemos algunas sugerencias con las que podrá mantener sus muebles al aire
libre, sin necesidad de arruinarlos.
Muebles de plástico
Este es el material por
excelencia para los muebles de exterior. Son los que más duran al aire libre, y
también los más fáciles de mantener. De hecho, el plástico se limpia muy
fácilmente con solo un trapito con un poco de agua tibia con detergente, para
luego enjuagarlos con una manguera.
Lo único que debería
considerar al comprar muebles de plástico u otros materiales sintéticos, es
preguntar al vendedor si los mismos podrían decolorarse por el excesivo sol, ya
que en algunos casos, con el tiempo, los rayos ultravioleta de la luz del sol
podrían provocar este daño en el plástico.
Pero en cualquier caso, mantener
los muebles con este tipo de material en lugares con sombra, ayudará mucho a
prolonga la vida útil de estos muebles.
Muebles de hierro
Para proteger, a los muebles
hechos de este material, de daños por la oxidación provocada por el agua, trate
a cada una de las partes de hierro con un spray de silicona.
Trate de esparcir la silicona por
todas partes, pero por sobre todo en aquellas partes inferiores, que normalmente
están más propensas a oxidarse.
Cuándo se trate de juegos de
hierro, tenga en cuenta especialmente cuidarlos de rasguños profundos y otras
imperfecciones, que podrían estropear más aún la superficie, facilitando el
óxido.
Si vive en un clima húmedo,
considere al aluminio como una alternativa al hierro, que tiene una apariencia
similar, pesa menos, y casi nunca se oxida.
Muebles de madera
A menos que realice un
fuerte gasto en comprar los costosos muebles de teca, debe saber que la forma
más fácil de proteger los muebles de madera, es con una aplicación inicial de
barniz o pintura al agua. Verifique que la etiqueta del producto que usará para
revestir la madera, le determine cuántas veces debería repetir el tratamiento
inicial.
Esto será muy útil para
todos los muebles de madera, incluyendo los de cedro, que a menudo, por su
durabilidad, son dejados al aire libre sin ningún tipo de protección, pero que
sin dudas durarán un tiempo considerablemente mayor si son revestidos con estos
materiales.
Muebles de mimbre
Como la superficie del
mimbre tejido tiene una gran cantidad de grietas que pueden contener y mantener
la tierra y el polen (que pueden también ser absorbidas por dicho material), es
muy importante que le realice una profunda limpieza periódica.
Para esto, podría usar un
pañuelo con agua tibia enjabonada, especialmente antes de la llegada de la
primavera. Luego, deberá echarles agua con un manguera y colocarlos en un lugar
bien soleado, para que se sequen rápidamente y no se humedezcan.
Almohadones y paraguas
Hoy en día, la mayor
parte de estos accesorios se hace en base a acrílico, una fibra sintética que
tiene el aspecto y la textura de la lona, pero que es muchos más resistente a la
decoloración provocada por el sol y el moho.
Las telas de acrílico se pueden
limpiar con un paño de agua enjabonada, para luego echarles agua con una
manguera.
Si ve que hay moho, utilice una
solución consistente en un tercio de blanqueador y dos tercios de agua
enjabonada, o directamente un producto comercial que podría conseguir en
cualquier ferretería o hipermercado, el cual no solo podrá quitar el moho, sino
también prevenir que el mismo vuelva a impregnarse en la tela.
Y si quieres aprender a realizar por ti mismo todos esos arreglos que tu
hogar está necesitando, inscríbete ahora en nuestro curso
gratis de Bricolaje y Arreglos del Hogar, haciendo clic
aquí.