Lentes de contacto: cómo cuidarlas
¿Estás usando lentes de contacto en este momento? Si has estado usando la computadora durante un buen rato, tal vez ya te las hayas quitado. La computadora es una de las tantas causas de molestias para los usuarios de lentes de contacto.
Si eres nuevo en lo que se refiere a lentes o si has desarrollado malos hábitos en el cuidado de las mismas, encontrarás a menudo tus ojos secos e irritados cuando las uses.
El cuidado apropiado de tus lentes y el seguimiento de las guías según su clase es importante para proteger tu visión y asegurar un uso confortable de las lentes. Estos son algunos errores comunes que podrías estar cometiendo y, en consecuencia, dañando tus ojos.
Limpiar con agua no es una buena idea
Tus ojos son muy sensibles y pueden infectarse con facilidad cuando no limpias las lentes en forma apropiada. Las lentes desarrollan una acumulación de sedimentos que puede irritar el ojo. Las soluciones para limpiar lentes tienen la capacidad de remover estas acumulaciones y de desinfectar.
El agua y las soluciones salinas hechas en el hogar pueden contener microorganismos, cloro y otros minerales que pueden dañar la lente o lastimar tus ojos.
Al menos que estés usando lentes descartables, debes limpiar tus contactos antes de cada uso. Emplea un estuche apropiado para su almacenamiento y limpia el envase y déjalo secar al aire entre usos.
Sólo usa las lentes de contacto durante el período de tiempo recomendado
Algunas lentes están diseñadas para ser removidas después de un día de uso. Otras pueden usarse por una semana o un mes sin necesidad de remoción.
En cualquier caso, la mayoría deben ser removidas y limpiadas a diario. Es importante que conozcas el programa de uso de tus lentes, en vistas de prevenir serios problemas en tus ojos.
Manipula con cuidado las lentes de contacto
Cuando te quitas o pones las lentes, asegúrate de manipularlas con manos limpias y secas. Evita lavarte las manos con jabones que contengan perfumes o aceites, y mantente alejada de las pantallas solares, cremas de manos o quitaesmaltes antes de entrar en contacto con tus lentes.
Si tus ojos están secos o irritados puedes usar gotas oculares para humedecer, mientras las usas, en lugar de quitártelas. De hecho, si sientes tus ojos secos y los contactos comienzan a molestar, intenta humectarlos antes de proceder a removerlos.
Si usas maquillaje no deberías ponerte las lentes hasta después de aplicarte los cosméticos, y deberías removerlas antes de limpiarte o quitártelos. Los polvos y los sprays pueden irritar los ojos, así que ten cuidado de no aplicar sombras o spray mientras usas las lentes. Si se produce irritación no te frotes los ojos; remueve las lentes y límpialas con una solución apropiada antes de volver a usarlas.
La vista es uno de los bienes más preciados que las personas poseemos. Protégela de los daños. Si crees que te has lastimado o que padeces una infección no utilices las lentes hasta que te revise un especialista oftalmólogo.
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