Desde hace algunos años, los diskettes empezaron a dejarle su lugar a nuevas tecnologías.
El soporte magnético, como medio de almacenamiento, perdió terreno ante los medios digitales y la generación de los dispositivos que utilizan memoria flash.
La practicidad y la expansión de las unidades de CD y DVD, convierten a este soporte en una opción imprescindible para los equipos actuales, que han reemplazado las antiguas disketteras de 3 ½, por las modernas lecto-grabadoras de CD y DVD.
Qué debemos tener en cuenta en el momento de comprar una grabadora de DVD y CD
Tanto a la hora de armar un equipo nuevo, o de reemplazar una lectora o grabadora de CD o DVD, nos encontramos con la disyuntiva de qué elegir.
Hoy en día, los costos de este tipo de dispositivos, los han acercado fuertemente al público general, con una buena variedad de opciones, como las que vamos a conocer a continuación.
Las grabadoras de CD pueden ser una opción más económica, pero no ofrecen la posibilidad de leer y grabar DVD.
Son cada vez menos frecuentes en el mercado, ya que la diferencia de precio entre éste producto y otros de mejores prestaciones, es cada vez más pequeña.
Los dispositivos denominados “Combo”, permiten leer y grabar CD y leer DVD (pero no grabar). Son una opción intermedia, que ofrece algunas presentaciones más que una grabadora de CD.
Pueden encontrarse en algunos equipos portátiles, pero son una opción que no justifica su valor, en equipos de escritorio.
Las grabadoras de DVD, son la alternativa más recomendable en la actualidad, ya que logran un muy buen equilibrio entre precio y prestaciones.
Cuando decidimos adquirir una grabadora de este tipo, debemos verificar que sea Dual Layer (DL). Esto permite utilizar discos de doble capa, que brindan el doble capacidad.
En este sentido, debemos tener en cuenta que los discos Dual Layer grabables, aún son costosos (entre 8 y 10 veces el valor de un DVD grabable de una capa).
También debemos asegurarnos que sea regrabadora (para poder utilizar discos regrabables) y que sea compatible con discos +R, +RW, -R y –RW.
Si bien la mayoría de las grabadoras disponibles actualmente en el mercado cumplen con estas características, es importante estar seguros que estamos adquiriendo un equipo moderno y totalmente compatible con los estándares actuales.
Siguiendo con las características del dispositivo, encontraremos las “X”, que indican la velocidad de lectura y grabación a que puede alcanzar.
Valores entre 16X y 20X son los que pueden encontrarse actualmente en el mercado y son suficientemente para el uso doméstico.
Una opción interesante, que está disponible solo en algunos dispositivos, es la función Lightscribe. Esta característica permite rotular los discos con la grabadora, tanto CD como DVD, utilizando el láser.
Esta opción brinda muy buenos resultados, reemplazando el uso del marcador o las etiquetas. Las grabadoras compatibles con esta tecnología pueden tener un valor de entre un 10% y un 20% más que las grabadoras comunes.
Debemos tener en cuenta que los DVD virgen, que permiten utilizar la tecnología Lightscribe, tienen un valor entre tres y cinco veces superior al de un DVD virgen común.
Otra de las características que debemos contemplar, es la conectividad que brinda el dispositivo.
Si nuestra computadora tiene algunos años, seguramente deberemos optar por una grabadora compatible con tecnología IDE.
Si nuestra PC tiene un motherboard moderno, podemos inclinarnos por las ventajas de rendimiento que nos ofrecen las grabadoras SATA.
Para verificar que tecnología es compatible con nuestro motherboard, podemos leer el manual de la placa madre o consultar en el sitio web del fabricante.
Otra alternativa está dada por las grabadoras de DVD con conexión USB. La principal ventaja de estos dispositivos, es que podremos conectarlos indistintamente a PC (de escritorio o Notebook) o MAC.
Estas grabadoras se destacan por su versatilidad, pero son convenientes solamente si nuestras necesidades justifican su utilización, ya que su precio puede estar entre un 70% y un 90% por encima de una grabadora IDE o SATA.
A un costo que todavía resulta elevado, aparecen los primeros dispositivos ópticos para PC, capaces de trabajar con discos Blu-ray.
Cabe aclarar que esta tecnología permite almacenar 25 GB por capa, más de cinco veces lo que amite un DVD.
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