Cómo hacer yogurt casero
Llamamos yogur a lo que normalmente es un fermento láctico, el origen del término proviene de YOGUR , según el diccionario de la RAE significa: Variedad de leche fermentada, que se prepara reduciéndola por evaporación a la mitad de su volumen y sometiéndola después a la acción de un fermento denominado maya.
Este tipo de alimento posee los microorganismos que actúan en la fermentación de la leche pero transitan en nuestro aparato digestivo sin instalarse en donde deben estar permanentemente y ese lugar es nuestra flora intestinal, en este sitio solo determinados microorganismos son los normales para nuestra salud.
Entonces si por intermedio de un yogur aparte de sus propiedades alimenticias propia de la leche fermentada aporta los microorganismos que deben residir en la flora intestinal ese yogur tendrá propiedades muy potentes en la actividad probiótica y por consecuencia beneficios a la salud.
Aquí en Argentina tenemos a nuestro alcance poder componer nuestro yogurt casero de alta potencia en efectos saludables.
Me permito asegurar esto dado que desde principio del 2005 lo consumo y observé cancelaciones totales en procesos inflamatorios provocados por varios motivos, uno de ellos gingivitis.
El yogurt que propongo puede componerse muy fácilmente, como condición de primera importancia debemos aplicar en su factura y consumo la totalidad de las practicas de higiene propias de la alimentación, sin incurrir en descuidos ni desprolijidades, esto es a tener muy en cuenta siempre en los alimentos.
Se utiliza como origen de los microorganismos una especialidad medicinal llamada TOTALFLORA, para obtenerlo Usted deberá recurrir a su médico (gestionar receta) y directamente le informa de lo que Ud se propone, deberá Ud cumplir lo que el profesional indique. Preferiblemente llévele el texto de la receta que a continuación señalamos.
Receta de yogur casero
Tomamos el contenido de una cápsula y lo arrojamos en un litros de leche, entera o desgrasada, dejamos esto a temperatura ambiente en recipiente no metálico y lo removemos cada algunas horas por ejemplo 6 u 8 no es necesario en horas de descanso.
Cuando observemos que al retirar la cuchara utilizada, queda como si fuese pintada de blanco la leche se tornó algo espesa, allí ya tenemos hecho lo que llamamos primer cultivo, este lo podemos empezar a consumir reservado siempre en heladera,
Tomamos una pequeña porción del mismo y lo arrojamos en otro litro de leche al que también trataremos como al primer cultivo la única diferencia es que este segundo se hace ya sin el medicamento, seguimos rutinariamente igual hasta el décimo litro, a partir de allí recomenzamos todo de nuevo con otra capsula del TOTALFLORA.
No se debe seguir recultivando con el yogurt anterior por que no sabemos si en alguna de esas etapas hubo degradación de los microorganismos o por ser desprolijos con el aseo lo hemos contaminado.
Nunca y bajo ninguna circunstancia debemos calentar la leche, este yogurt no tolera temperaturas que sobrepasen los 40 grados, en consecuencia el antiguo cuento de la yogurtera aquí no se aplica.
Dado que los microorganismos se instalarán en la flora intestinal no es necesario ingerirlo diariamente. Se le puede agregar edulcorantes o cereales por ejemplo chia molido que aporta omega3 o cesamo molido que aporta omega 6 y 9 además de calcio.
Por Eduardo Fileni
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