La dieta del Dr. Atkins

Puede ser una empresa dura y desesperada el querer bajar de peso. Por eso muchos se han volcado a una dieta muy conocida y que aparentemente produce buenos resultados: la Dieta del Dr. Atkins...

El plan del Dr. Atkins (que data de la década del 70) aboga por un alto consumo de proteínas con una restricción significativa de los carbohidratos.  

Puesto que esta dieta va en contra de la mayoría de los otros planes para perder y mantener el peso sanamente, la mayoría de los profesionales de salud pública y las organizaciones especializadas en el tema la desaprobaron.  

Aunque muchos seguidores de Atkins resaltan las virtudes de esta dieta. ¿Por qué? Quizás porque esta dieta realmente hace perder el peso. Tenga presente, sin embargo, que deben influir muchos factores para que una dieta funcione a la perfección.  

Muchos pueden admitir que si la satisfacción se logra al perder peso inicial (principalmente pérdida de músculos y de agua inicialmente), y no perder peso a largo plazo, permanentemente alcanzado de una manera sana, hay que sacarse el sombrero ante Atkins.  

Desafortunadamente, esta y muchas otras dietas no servirán para su salud a largo plazo o su control de peso a largo plazo (y consideramos que usted querrá sacarse esos kilos de más por siempre). Considere lo siguiente: 

FALACIAS DE LAS DIETAS 

Si usted está en el plan de Atkins ahora o está considerando intentarlo, usted debe echar una ojeada primero a su historia dietaria.

¿Cuántas dietas ha intentado durante todos estos años? ¿Muchas veces ha perdido peso y lo recuperó después para empezar otro tratamiento milagroso? ¿Usted siente honestamente que un plan pobre en carbohidratos lo puede mantener por el resto de su vida?  

Si no, entonces es apenas un arreglo temporal como el resto de las dietas. No más tortas de chocolate, de papas fritas, de espagueti, de crepés, de empanadas u otras delicias favoritas. Para siempre.  

Incluso Atkins admite que si usted retoma otra dieta de restricción de carbohidratos, los kilos volverán. Usted tiene que usar su historia personal para evaluarse usted mismo. Los estudios demuestran que las dietas restrictivas que eliminan varios alimentos o grupos de alimentos tienen un porcentaje alto de efectos indeseables en un cierto plazo.   

SIN MAGIA EN LA ELIMINACIÓN DE CARBOHIDRATOS 

¿Por qué algunas personas pierden peso con esta dieta? ¿Hay un cierto fenómeno mágico que ocurre en el cuerpo si se suprimen los alimentos de alto contenido de carbohidratos? No.

La dieta de Atkins esencialmente elimina varios alimentos y grupos de estos como las frutas, los cereales, los panes, los granos, los almidones, los alimentos cocidos al horno, los productos lácteos, y los dulces.

Esto se traduce simplemente en una reducción de calorías diarias significativa – la base de cualquier dieta para la pérdida de peso. Cualquier reducción de calorías – ya sea de proteínas, de carbohidratos o de grasas – dará lugar a la pérdida de peso.

La fórmula básica de la pérdida de peso es: las calorías quemadas deben exceder a las calorías consumidas. Fácilmente se puede lograr eliminando a la mayoría de los alimentos en un menú típico. No hay nada revolucionario en este régimen.  

RÁPIDA PÉRDIDA DE AGUA 

Mucha gente se engancha instantáneamente en el plan de Atkins debido a una pérdida rápida inicial del peso. La pérdida inicial del peso no se da por la pérdida de grasas del cuerpo, sino que viene del agua.

¿Cómo es eso? La energía preferida del cuerpo es la glucosa. Cuando los carbohidratos son perceptiblemente restringidos, mientras se realiza la dieta de Atkins, el cuerpo sigue necesitando una su fuente constante de glucosa – que proviene de los carbohidratos. 

El cuerpo anticipa estas situaciones almacenando glucosa de emergencia, conocida como glucógeno, en los músculos y en el hígado.  Por cada gramo de glucógeno que el cuerpo almacena, se almacena con él tres gramos de agua.  

Si los carbohidratos son perceptiblemente limitados, el cuerpo comenzará a romper estos almacenamientos de glucógeno para obtener glucosa como fuente de energía. ¿Y qué sucede cuando el almacenamiento de glucógeno se revierte?  

Claro está: se libera el agua almacenada, que se elimina del cuerpo. Esto da el aspecto falso de una victoria mágica. Pero si su meta es perder mucho peso entonces esto no es motivo de celebración.

¿INSULINA INSANA?

Las dietas pobres en carbohidratos despiertan un miedo irracional sobre a la insulina. La insulina, como otras hormonas del cuerpo, tiene muchas funciones vitales. Una función es permitir a nuestras células tomar la glucosa de la circulación sanguínea y utilizarla como energía.

Esto nos da la capacidad de hacer todo, desde levantar un dedo a recordar. La insulina tiene una fama impopular debido al hecho de que ayuda a que la grasa se almacene en el cuerpo. Debido a esta función que almacena grasa, los planes bajos en carbohidratos han sentenciado a la insulina a la condenación eterna.

Desafortunadamente, es una muy mala reputación basada en creencias falsas. Una teoría falsa es que solamente los carbohidratos de la dieta estimularán la producción de insulina. Pero la verdad es que todos los alimentos ingeridos estimulan la producción de insulina.

La segunda teoría falsa es que la insulina almacena la grasa solamente cuando se comen alimentos ricos en carbohidratos.  La verdad con respecto a la bioquímica del cuerpo es que la grasa será almacenada solamente si se comen demasiados alimentos (de cualquier tipo).

Si al cuerpo ingresan menos calorías que las que utiliza en un día, todas esas calorías serán quemadas o utilizadas para la energía. No importa qué porcentajes de esas calorías vengan de las grasas, de las proteínas o de los carbohidratos.

Por otra parte si el cuerpo toma más calorías de las que quema, la insulina ayudará a almacenar esas calorías adicionales como grasa. Otra vez, no importa de donde vengan las calorías adicionales.

De hecho, si las calorías adicionales son de carbohidrato, el cuerpo quema las calorías adicionales para transformar el carbohidrato en grasa almacenada. En contraste, las calorías grasas adicionales se pueden almacenar inmediatamente como grasa.

Culpar a la insulina como la causa única a la obesidad es no solamente absurdo, sino un pensamiento irresponsable.

¿Qué hay de todos esos días en que no quemamos calorías y nos quedamos sentados frente al televisor, manejando nuestros autos, comiendo helados u otros dulces? ¿No puede ser esta una mejor explicación para la gordura?

La obesidad es una enfermedad excesivamente compleja. No sólo tiene que ver con el exceso de consumo de calorías y de la falta de ejercicios físicos, también es genética, psicológica, social, por problemas médicos y muchas otras cosas.

El hecho de que los tamaños normales de las porciones servidas en los restaurantes están creciendo es un ejemplo. La obesidad no es una adicción simple de curar y la insulina no es la causa. 

LAS POBLACIONES SANAS COMEN CARBOHIDRATOS 

La idea de que una dieta rica en carbohidratos es responsable de la obesidad y de enfermedades (un concepto apoyado por las dietas que suprimen los carbohidratos) es contrapuesta totalmente por muchos estudios de población.

Por ejemplo, en Japón, los carbohidratos componen la mayoría del aporte calórico diario. Los alimentos con alto contenido en carbohidratos son el arroz y los granos, que son los productos básicos de la vida japonesa y los productos ricos en proteímas, como los animales, tienen un consumo mínimo.

En contraste con el supuesto mal de los carbohidratos, Japón tiene uno de los índices más bajos de obesidad, de enfermedades cardíacas, de cáncer y de diabetes en el mundo.  

ENFERMEDADES CARDÍACAS 

La dieta de Atkins no pone ningún límite en la cantidad de productos ricos en grasas saturadas que uno puede consumir cada día. Grandes porciones de alimentos como  mantequilla, carne roja y tocino, se proponen como permitidos.

El plan de Atkins contradice los estudios que han demostrado la correlación significativa entre las dietas ricas en grasas saturadas y el incremento de las enfermedades cardíacas.

Algunos estudios encontraron una "vuelta atrás" real del proceso que lleva a las enfermedades cardíacas con una dieta limitada a solamente a 10% de calorías provenientes de las grasas por día. 

Los participantes de este estudio siguieron una dieta abundante en frutas, vegetales, granos, con mayoría de calorías provenientes de carbohidratos.  

Por lo tanto: si usted padece una enfermedad cardiaca o tiene antecedentes familiares, manténgase alejado de las dietas pobres en carbohidratos. 

LA CONEXIÓN DEL CÁNCER 

Según el Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos, cinco porciones de frutas y vegetales por día es el mínimo indispensable que una persona debe comer para reducir el riesgo de que el cáncer se desarrolle.

Además los estudios han demostrado que aproximadamente el 35% de todas las muertes por cáncer se pueden relacionar con los malos hábitos alimentarios. Un alto consumo de granos también se ha ligado a la reducción del riesgo al cáncer.

¿Puede uno consumir la cantidad necesaria de productos y de granos enteros para ayudar a prevenir el cáncer, con la dieta de Atkins? Imposible. Las cantidades abundantes de frutas, vegetales y granos supondrían también muchos carbohidratos, y en esta dieta no serían permitidas.

Por eso hay que ser cuidadoso a la hora de empezar una dieta baja en carbohidratos si usted está interesado en reducir las chances de contraer cáncer. 

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