¿Qué es lo que nos pasa cuando las
deudas nos están acosando y no parecemos ser capaces de encontrar de que forma
podremos salir de ellas, por lo menos de una forma totalmente legal?
Esto
variará dependiendo de cada uno de nosotros, pero lo que si es casi seguro es
que tendremos muchísimos problemas para sacarnos el tema dinero de la cabeza.
Estaremos todo el tiempo preocupados, dándole vueltas a la situación, tratando
de encontrar cómo podemos pagar, qué
es lo que podemos hacer y cómo podremos asegurarnos
de que nunca más vamos a estar en esa situación.
Es
algo constante, en el fondo de nuestra mente, siempre
presente y nunca dejándonos tranquilos. Sabemos que esto no nos deja tranquilo
en ningún momento.
Y decir que no nos deja tranquilo en
ningún momento implica que tampoco lo hace a la noche. No hay mejor forma de
asegurarnos que no vamos a poder dormir una noche entera que el pensar demasiado
cuando nos vamos a acostar.
Y cuando es por buenos motivos tal vez
lo podamos evitar, pero cuando es por motivos tan desagradables y preocupantes,
la verdad es que seguramente no podremos evitar este exceso de pensamiento,
estas maquinaciones constantes.
Y daremos vueltas en la cama,
pensando, pensando, pensando. Y seguramente ni siquiera sacaremos nada en limpio
de tanto esfuerzo mental, sino que lo único que lograremos es preocuparnos cada
vez más y dormir cada vez menos.
Ahora bien, nos estaremos preguntando
como se relaciona esto con el título de este apartado del articulo. Lo que
algunas recientes investigaciones en el área de la medicina han probado es que
la falta de sueño o el no poder dormir la cantidad de horas necesarias durante
la noche, puede ayudar a que ganemos peso.
Esto se debe a que el sueño
insuficiente reduce los niveles de leptina en el cuerpo. La leptina es una
hormona que se encarga de regular el apetito, de señalarle al cerebro en que
momentos necesita ingerir más alimentos y en que momento esta bien como esta.
O
sea, es una hormona que nos marca cuando debemos comer, cuando necesitamos de
más comida y en que momento no necesitamos nada más. Los bajos niveles de leptina están asociados con la obesidad.
En otras palabras, si bien el
proceso es indirecto (la preocupación por las deudas genera falta de sueño, lo
cual genera el cambio en la cantidad de leptina y ayuda a la obesidad) la
relación que existen entre los dos procesos es totalmente directa.
Además, generalmente cuando nos
sentamos a revisar por decimoquinta vez las cuentas para ver si no hemos dejado
nada de lado que nos salve la vida o asegurarnos que no estamos todavía en
mayores problemas de lo que pensábamos, es muy probable que comamos algo para
entretenernos o simplemente para ayudarnos a pasar el mal trago que significa
hacer números.
Esto también ayuda, aunque es
fácilmente evitable por el simple método de no comer o comer cosas que no
engordan mientras nos aseguramos nuestro futuro económico.
Si quieres conocer las dietas que
realmente funcionan, descarga ahora nuestro libro
gratis Adelgacemos con salud-Las dietas que
funcionan, haciendo clic
aquí.