Todos los papás sabemos que en algún momento tenemos que ponerles límites a nuestros hijos.
Además, la opinión social es “tenés que ponerle límites”, y nosotros quedamos en un limbo de ideas, de valores sin saber por qué tenemos que hacerlo realmente.
La única manera de incorporar algo a nuestra vida es saber por qué hay que hacerlo, por eso a continuación explicaremos estos motivos.
¿Por qué poner límites?
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Porque nuestros hijos necesitan moldear su carácter
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Porque necesitan saber que esta bien y que no lo es
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Porque tienen que aprender que la libertad de uno termina donde empieza la libertad de los otros. De esta manera, lograremos fomentar su responsabilidad
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Porque el límite permite una contención al niño si es aplicado constructivamente
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Porque se le enseña a ser responsable de sus actos
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Porque los chicos necesitan disciplina y el límite es amor y contención
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Porque así aprenderán, poco a poco a socializarse, a crecer como personas autónomas, libres, con seguridad, con normas y reglas incorporadas para poder compartir y convivir en la sociedad que les toca vivir. Un niño que respeta es un niño que comparte, que juega, que se relaciona con los otros.
Límites, disciplina y castigo
- Firmeza: Sin golpes ni castigos físicos o psíquicos. El niño percibe nuestra seguridad y la va a respetar
- Mostrarnos seguros pero con afecto y hablándoles mucho
- Coherencia entre papá y mamá. Si alguno de los papás desautoriza al otro, el niño no respetara a ninguno de los dos, por el doble mensaje
- Ofrecerle alternativas posibles que si pueda realizar
- Respetar su enojo sin necesidad de intervenir. Acompañándolo y dándole tiempo para que se le pase
- Ser concretos
- Cumplir y sostener lo que decidimos
- Ser constante en la puesta de límites
- Poner un "NO" claro
- Limitarlos estando nosotros tranquilos, sin gritos
- Anticiparles cuando algo va a terminar o cuando no queremos que haga determinada cosa. Nuestra conducta y actitudes como padres serán el modelo y la forma en la cual comprenderán que esperamos de ellos.
Y desearán responder a esa expectativa por el amor que nos tienen. Si nos manejamos con premios y castigos, solo lograremos un adiestramiento, pero no un verdadero aprendizaje que los ayude a ser felices y libres.
Lic. Daniela S. Batistoni
Psicologa Clínica
(0297) 154324947
www.danielabatistoni.com.ar
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