Un
informe publicado en la revista norteamericana Evolutionary Psychology, afirma
que los besos permiten a las mujeres evaluar a quién podría ser el compañero
ideal, mientras que para ellos es un ingrediente más que predispone al encuentro
sexual. Los encuestados interrogados fueron mil estudiantes.
La investigación reveló que los hombres están más dispuestos a hacer el amor
con alguien que besa mal, con quien no han besado o incluso con aquella persona
a la que no hallan atractiva. Los resultados también han develado que para
ellas, los besos son una manera de crear lazos afectivos.
“Las mujeres discriminan más que los hombres, suelen examinar y chequear
constantemente a los hombres, que no suelen estar tan atentos en el tema, pero
es una condición que los distingue a ambos aunque ambos usan el beso para
estrechar un vínculo, sea este sexual o primero afectivo”, explica el
sexólogo argentino Manuel Della Barca.
Según el investigador Gordon Gallup, quien estuvo a cargo del informe publicado:
“Los hombres utilizan el beso para
llegar a un fin: conseguir sexo y reconciliarse, las mujeres van experimentando
y estudiando al hombre que besan y evaluar así el nivel de compromiso de la
pareja potencial”.
No se puede dejar de
reconocer la importancia del beso, si se tiene en cuenta la inclinación de esta
investigación, la mujer es proclive a dejar a un hombre porque no sabe besar o
puede caer a sus pies, simplemente con un beso bien dado.
“El contacto que se tenga es vital para saber si se quiere volver a ver a esa
persona u olvidarla para siempre. Besamos de manera intuitiva, pero no estaría
mal que el beso fuese siempre sentimiento y recordar sobre todo a los hombres
que se debe cuidar de no tener mal aliento, no producir sonidos raros y tragar
saliva antes de besar porque los besos babosos matan toda la pasión”, señala
el especialista.
El
beso es el preludio para seguir adelante con el encuentro sexual o con una
relación duradera, por tal motivo, el saber y darle importancia al besar es
vital. “Son muchas las mujeres que consultan porque sus compañeros no saben
besar y no se atreven a decírselos.
No es fácil después de años de relación que la mujer le diga a su pareja que no
le gusta cómo besa. Hay que reconocer que en la mayoría de los casos el hombre
no le pone mucho empeño al tema porque no lo considera de importancia, y la
realidad es que el varón tendría mucho más éxito con las mujeres si fuera buen
besador”, sugiere Della Barca.
Ciertos consejos
entonces, no vienen mal para revertir el resultado de esta investigación que
pone en alerta tanto a hombres como a mujeres.
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Los
besos con lengua son los más sensuales. Si se dan bien, llevan gran carga sexual
ya que es posible explorar toda la boca y jugar dentro de ella con la lengua de
la pareja.
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Los
besos cortos y suaves producen gran excitación. Rozar apenas la piel con la
lengua sin llegar a introducirla en la boca puede resultar una experiencia de lo
más erótica.
Lo mejor es alternar
ambos besos para combinar sexualidad y sensualidad. De esta manera, ninguna
mujer volverá a quejarse de los besos y caricias recibidas.
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