¿Le gustaría que su ex-cónyuge herede su casa, sus cuentas bancarias y sus
beneficios de jubilación, a pesar de que usted los hubiese deseado para sus
hijos?
¿Y qué pasaría si el testamento de su padre cae en manos de su hermano aunque le
habían prometido la
casa de fin de semana
a usted?
Estos problemas de herencias ocurren más a menudo en las familias ensambladas,
en las que el marido, la mujer, o ambos traen hijos de sus matrimonios previos.
Establecer la herencia en una familia ensamblada es complicado, y potencialmente
cáustico. Las decisiones estrictamente monetarias son de por sí complicadas.
Pero, todas las circunstancias alrededor de la unión de dos familias,
normalmente por divorcio o muerte de cónyuges, a menudo producen una radiación
emocional y psicológica que puede tener considerables e impredecibles efectos.
Las buenas intenciones no bastan
A diferencia del modelo tradicional, marido-mujer-hijos, las familias
ensambladas pueden contar con sus hijos, los de ella, los de ambos, y en muchos
casos, un plantel múltiple de abuelos.
La diferencia de edad entre los nuevos recién
(re)casados,
como así también las edades de sus hijos, puede tener importantes ramificaciones
sobre los testamentos.
En natural que usted desee pasar el fruto de su trabajo de toda la vida a sus
hijos biológicos. Pero también querrá mantener a su esposa y crear una sola
familia feliz a partir de las dos partes. Es un delicado acto de balance.
Existen hijos anteriores que deben ser tenidos en consideración,
y
es fundamental tener una actitud de imparcialidad con todos los niños
involucrados.
Aún cuando los miembros de la familia combinada parecen llevarse bien, los
planes financieros pueden ser complicados. La potencial sospecha, las asperezas,
aún peores entre hermanos escépticos (y medios hermanos y hermanastros), pueden
ser tan grandes que muchas personas evitan tratar el tema de las herencias
juntos, hasta que algunas veces ya es demasiado tarde.
Y hasta la mejor de las intenciones puede salir mal.
Cambie su testamento
Para prevenir estas situaciones se deben hacer planes financieros meticulosos.
La meta es alimentar a su nueva familia ensamblada y asegurar su bienestar una
vez que usted se haya ido.
Un plan financiero efectivo para una familia ensamblada debería:
·
Desheredar a su ex
·
Proteger a sus propios hijos
·
Proveer a su nueva esposa, y
·
Minimizar los impuestos estatales
¿Desheredar a su ex?
Sí. Este no es sólo un paso poco conocido, sino que es de vital importancia para
evadir los problemas legales que parecen novelas de televisión. Al menos que
remueva activamente a su ex-cónyuge como beneficiario o dueño adjunto con
derecho a supervivencia, él o ella podría legalmente heredar su casa, su plan de
retiro, su seguro de vida, etc.
Esto puede ocurrir aunque usted especifique lo contrario en su testamento y
aunque las leyes en su estado automáticamente extingan los intereses de su
ex-cónyuge en sus fondos o activos.
¿Cómo puede ser?
Todas estas cosas
anulan
al testamento. Son transferencias no probadas. Las
únicas transferencias que un testamento cubre son aquellas que están
legalizadas.
A menos que siga los pasos legales pertinentes, su ex mujer o ex esposo será
nombrado por un tribunal testamentario para manejar la herencia que usted les
deje a los niños. Si uno de sus hijos muere antes que él o ella, su ex-cónyuge,
y no los hermanos, heredará esa parte del testamento.
Hay que cambiar a todos los beneficiarios. Existen personas que llevan años
casadas y aún tienen como beneficiarios a sus padres.
Proteger a sus hijos y proveer a su cónyuge puede parecer simple, pero en las
familias ensambladas siempre hay problemas. Si usted deja todo a su cónyuge, con
instrucciones para que mantenga a sus hijos, corre el riesgo de desheredarlos ya
que su testamento podría caer sobre su descendencia y no sobre la suya.
Existe una posibilidad que puede pasar en algunas parejas donde los hijos, por
ejemplo, son más grandes que la madrastra. Entonces puede que sus hijos no vivan
para cobrar la herencia que usted pretendía, o su cónyuge puede elegir dejar
todo a sus propios hijos o a su nueva pareja.
Por suerte, los planificadores financieros tienen las herramientas legales para
asegurar que usted, accidentalmente, no desherede a sus hijos. Ellos,
seguramente, lo podrán asesorar.
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