Hoy
veremos como tratar con un hábito muy frecuente y muy molesto de los perros.
Llegar a
casa y encontrar agujeros en todo el césped del jardín que con todo esmero
estamos cuidando es muy frustrante, y si tienes un perro la correlación existe
sin ninguna duda. Pero no te molestes en tratar de enfrentar a tu perro después
del hecho.
El
castigo después del hecho es ampliamente conocido como el menos eficaz y
potencialmente más dañino de todos los tipos de
entrenamiento de perros en la
tierra.
Incluso si traes a tu perro al lugar, lo tomas por la piel del cuello y
los regañas mientras diriges su cabeza en su profunda obra, no tendrá ni idea de
lo que estas haciendo.
Tomas una
respiración profunda, y con calma te diriges al patio trasero para localizar a
tu perro, con la intención de hacerle algunas preguntas sobre su caprichoso
hábito de excavación.
Primera Posibilidad
"¿Estará
tratando de escapar? Si tu mascota no está castrada, entonces puede ser que esté
poniendo en práctica su instinto de reproducción, y las excavaciones sean parte
de su plan de "fuga" amorosa.
Segunda Posibilidad
Otra
posibilidad es que tu perro está cavando para intentar encontrar su libertad. Si
tu perro realiza las excavaciones durante el período de tu ausencia, de hecho,
puede tener problemas de "Ansiedad por Separación" que tendrás que tratar
directamente.
Una vez
que se trata éste problema ya no se le ocurrirá continuar excavando en tu
jardín.
Tercera Posibilidad
¿Hace
demasiado calor en el lugar donde está tu perro? Todos sabemos que los perros
eliminan calor mediante el jadeo.
Pero también les gustan las madrigueras para
refrescarse, especialmente cuando no hay un lugar de sombra a la vista.
Así que
tendrás que descartar esta posibilidad como factor motivador para la excavación
de tu perro, y asegurarte de que tiene un lugar para mantenerse fresco y al
reparo del sol.
Por último
¿No
estará enterrando sus cosas?" Esto es simplemente una vieja costumbre que se
deriva del hecho de que sus antepasados a menudo guardaban lo que no podían
comer en una sentada.
Este
hábito puede ser difícil de romper, pero trata de cambiar la costumbre de
dejarle huesos al perro cuando estás por ausentarte.
Un hueso
jugoso puede ser un gran regalo para tu perro cuando estás en casa, pero puede
ser el motivo de sus excavaciones cuando te vayas.
Puede que
tenga que cambiar las zonas de acceso del perro, o cercar un área que deseas
mantener para el jardín o como campo de fútbol infantil.
También
puedes intentar la creación de una zona de tierra o excavación en una caja de
tierra o de arena donde le permitas expresar sus instintos.
Muchos
perros son salvajes sobre la arena, e incluso se lo puede atraer a la zona,
enterrando algunos de sus huesos en éste lugar. He visto ésta opción dar buenos
resultados.
En el
gran esquema de los problemas de obediencia del perro, sin embargo, esto debería
ser más una molestia que otra cosa.
Algunos dueños me recuerdan que es mejor
tener una mascota saludable y feliz aunque tengan que sacrificar un césped
perfecto.
No está
mal.
Por Dr.
Jose Arca
Médico veterinario, autor de "Cómo
educar tu perro paso a paso"
http://bit.ly/adiestrar