Extensiones
para el cabello
A la hora de
alargar o dar volumen al pelo, las extensiones son una posibilidad. Existen dos
tipos de extensiones: permanentes y removibles. Las tiras de pelo natural son
más duraderas que las artificiales y no requieren de muchos cuidados.
Otro método
muy bueno es el “greatlenghts” que la mayor diferencia está en la calidad del
pelo que se aplica. Las extensiones se unen al pelo mediante una queratina
artificial que es lo que evita que se desprendan con el calor. Estos duran
alrededor de 6 meses y no necesitan de mantenimiento.
Igual hay que
aclarar que toda agresión sobre el cuero cabelludo favorece la pérdida de
proteínas, el resecamiento y la caída del pelo. Por eso las extensiones suponen
dos riesgos potenciales: por un lado los pegamentos pueden producir dermatitis
de contacto en quienes tienen predisposición a las alergias.
Y por otro lado se
puede producir alopecía, que es la pérdida del cabello localizada, por efecto
del tironeo en el cuero cabelludo.
Aunque hay
otros especialistas que afirman que en un 90% no causan daño alguno. Lo que si
se debe consultar a un especialista antes de colocárselas.
Pestañas postizas y micropigmentación
En cuanto a
las pestañas postizas existen muchas variedades, con distintas cantidades y
calidades de pelo, y en todos los tonos imaginables.
Lo que
conviene es elegir los mechones de acuerdo con el tamaño de los ojos.
Para
aplicarlas lo mejor es el pegamento a prueba de agua. Este se coloca sobre la
piel del párpado, en el nacimiento de las naturales, pero sin tocarlas.
Para las
mujeres que tienen pestañas largas y quieran arquearlas, existe un método que es
pegar un rulerito muy finito y colocar un líquido que las fija. Dura
aproximadamente 3 meses.
Por otro lado
están las cejas. Para las que las tienen despobladas, cortas o mal formadas, un
recurso posible es la micropigmentación si lo que se busca es un dibujo
duradero. Esta técnica de maquillaje semipermanente también la utilizan quienes
tienen cicatrices o sufren alergia a los cosméticos.
La técnica consiste en
implantar con una microaguja, pigmentos estériles dentro de la piel, como si
fuera un tatuaje. La aplicación es indolora, penetra apenas milímetro y medio en
la segunda capa de la piel y los pigmentos se aclaran con el tiempo.
El resultado
es más natural que el de las cejas pintadas, con la ventaja de que no se sale
con el agua. Lo que se recomienda es elegir el tono de los pigmentos de acuerdo
con los de la piel y el pelo.
Uñas postizas y esculpidas
En cuanto a
las uñas existen dos métodos de postizos: el tradicional de postizas y el más
moderno: el esculpido.
Las postizas son temporarias, para
aquellas que no quieran realizar un mantenimiento. Estas son limadas para que
sean más flexibles y finas. Duran alrededor de 25 días.
En cambio las
uñas esculpidas permiten realizar las actividades comunes sin miedo a romperlas.
Quedan muy naturales. Lo que se debe realizar es un service cada 25 días.
También existen las esculpidas con gel que son más flexibles y duran más tiempo
al mantener la base de la uña humectada.
Para el resto del cuerpo
El cuerpo
también puede transformarse sin necesidad de bisturí.
En cuanto a
los escotes existen varios métodos para agrandar el busto. El corpiño push-up es
muy utilizado por las mujeres. Estos levantan y aumentan un talle.
También
existe el corpiño Maximizer 3 clixs que tienen un dispositivo central que separa
o junta el busto, aumentando hasta tres talles.
También en
Europa y EE.UU. la tendencia en corsetería son los bodies segunda piel para
moldear y marcar las formas.
Para las piernas existen las medias Lumiere flat, ultrafina, invisible, que
reduce el vientre y estiliza las piernas.
Otra es la
media Magic Shaper que modela, achata la panza y levanta la cola a través de un
sistema de recortes y tramados que provocan distintas tensiones en las zonas más
estratégicas.
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