La mujer es experta en sentirse culpable por todo o casi todo. El estrés que provoca el haber hecho o no haber realizado algo en particular, genera un sentimiento muy fuerte y nocivo que si se reitera como un modelo de conducta habitual, que trae aparejado un grave problema difícil de solucionar.
Consejos sobre los cuales trabajar cuando se ha tenido la culpa en algo:
- Si se ha ofendido o lastimado a alguien, lo ideal es recapacitar y pedir perdón
- Si se trata de algo material, como un objeto roto, se debe pensar en reparar esa pérdida
- Las experiencias no son del todo negativas si se aprende del error cometido
- Una vez cometido el error se debe pensar en enmendarlo. Una vez resuelto el tema no se debe pensar una y otra vez en lo ocurrido.
La culpa “es una reacción emocional que se aprende”, sostiene la psicóloga argentina Valeria Mercado. “Lo que hay que entender sobre todas las cosas, es que la culpa es un sentimiento que ejerce mucho poder en la conducta ajena y que es una de las maneras por excelencia de manipulación que existen.
La mujer suele sufrir mucho más que el hombre de esta circunstancia, pero debe aprender a manejar esto sin que se convierta en una herramienta ajena de manipulación y que termina por crear una conducta de vida llena de temores, baja autoestima y problemas de relación con los otros. "La culpa es una emoción auto anulante, de la que hay que defenderse muy bien”, sostiene la profesional.
Claves importantes a tener en cuenta para no ser manipulados por el sentimiento de culpa:
- Aprender a aceptarse a uno mismo como es, a pesar de lo que digan los demas
- Estar pensando continuamente en el pasado y en lo que probablemente se ha hecho mal, no es saludable ni lleva a ninguna parte. Hay que preocuparse del presente y tener bien en claro los errores para no cometerlos de nuevo. Hay que saber diferenciar entre lo que genera la culpa y el querer aprender de los errores del pasado para mejorar
- Lamentarse es muy sencillo. Lo realmente difícil es intentar un cambio, crecer y desarrollarse. Conductas que hay que aprender a ejercitar
- Es importante tener en cuenta que la culpa es una elección y como toda emoción se puede elegir o desechar.
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