El tema de los talentos, es un tema álgido, difícil de comprender y de aceptar para algunas personas, pero es un hecho innegable.
Considero que mínimamente los talentos tienen dos orígenes, el que surge a través de la herencia y el que surge a través de las reencarnaciones.
Tiene un origen biológico y otro espiritual, es decir, el talento es algo con lo que nace el ser humano; y después la familia y el medio social donde crezca puede ser que le permitan desarrollar esos talentos, o pueden inhibirlo, y cuando el individuo ha madurado puede ser que el mismo lo desarrolle o lo inhiba.
El talento es una aptitud original que tienen los individuos para desempeñar determinada actividad humana, el tener ese talento aplicado a X cosa o actividad le permite desarrollar tal actividad con mayor habilidad, rapidez y eficacia que otras personas que no tengan el talento para la misma actividad en cuestión.
Desarrollar tu talento te hace diferente a los demás, los otros son quienes algunas veces te sirven de espejos para que te des cuenta de tus talentos. Cuando desarrollas tu talento en cierta actividad, generas alegría dentro de ti y alrededor de ti.
El mal uso del talento es lo que puede perder a los hombres. Cuando en verdad estás en el camino, recibes mucha información para que desarrolles tu talento, pero esa es la condición, tienes que estar en el camino.
Al ir desarrollando tu talento, tus capacidades van creciendo, tu conocimiento se desarrolla, tus sentidos se agudizan, empiezas a tener conocimientos mas sutiles y te vuelves cada vez mas competitivo en tu campo. Todos se benefician con el desarrollo de tu talento.
Desarrollar tu talento te permite sentir alegría en tu área laboral y en todo lo relacionado con esa área en donde estés aplicando tu talento, te permite sentir libertad y gusto en lo que haces.
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