Dormir, un sueño que a veces parece inalcanzable

curarinsomnio

Todo lo que debe saber sobre el sueño normal y el insomnio, para comenzar a dormir como Dios manda.

¿Se
acuerda el lector de Rip Van Winkle, el personaje del clásico relato de
Washington Irving?

Rip,
un día otoñal hizo una caminata a las montañas y se durmió al pie de un árbol
por 20 años.

Todos
necesitamos dormir. EI sueño es esencial para nuestra salud.

A
los 60 años la mayor parte de la gente ha dormido 20 años o más… ¡1/3 de
su vida!…

 ¿Qué
es el sueño? Una definición dice: “El
sueño
es un período de conciencia
reducida
, del cual una persona puede ser sacada empleando un estimulo
adecuado.” En otras palabras, del sueño se puede despertar. Si no, ¡estaríamos
en coma o habríamos muerto!

Sabemos
que necesitamos dormir. Pero, a pesar de que se han realizado tantas
investigaciones acerca del sueño, nadie tiene la respuesta completa acerca de por
qué
lo necesitamos. Los científicos pretenden arrancar al sueño sus
secretos. A pesar de ello, el sueño permanece rodeado de misterios.

¿Cuál
es la diferencia entre estar despierto y estar dormido?

Al
parecer se trata de una pregunta simple.

Cuando
estamos despiertos, sabemos lo que sucede a nuestro alrededor. Podemos ver,
sentir, oír y responder con pensamientos y acciones.

Cuando
estamos dormidos, nuestros sentidos están temporalmente en estado latente.
Funcionan de todos modos, pero la mayoría de los mensajes no llega a la corteza
cerebral. En estado de sueño profundo, uno no está consciente de nada de lo
que sucede en el ambiente que lo rodea. Por lo menos, la memoria no lo registra.

El
sueño es un fenómeno sumamente complejo, y está controlado por una variedad
de acciones que suceden dentro del cerebro mismo, y por las influencias
ambientales externas.

¿Quién
nos hace dormir?

EI
cerebro humano es la obra maestra de la creación.

Está
encerrado en una sólida caja de hueso, y se halla protegido además por el
fluido cerebroespinal, en el cual flota, así como por un arnés fibroso que lo
sujeta y lo mantiene en su lugar
por medio de ligamentos.

A
pesar de ser uno de nuestros órganos biológicos más poderosos, el cerebro es
uno de los más vulnerables.

Para
funcionar, debe tener ciertos niveles mínimos de oxígeno y glucosa. Si no están
disponibles, el cerebro muere. Si se lo priva de oxigeno sólo por 8 minutos,
las células cerebrales sufren daños (por lo general irreversible).

Una
de las funciones más importantes del cerebro es la capacidad de atención, que da como resultado la conciencia.

Es la conciencia lo que nos permite
actuar. Ya sea para suplir nuestras necesidades (por ejemplo, comer si sentimos
hambre], o para conceptualizar y ser creativos. Y además nos provee de nuestra
identidad especial, de nuestra personalidad, de nuestra capacidad de amar y
hacer elecciones inteligentes.

En
la célula nerviosa, los mensajes del cerebro son llevados por una corriente eléctrica.
En el punto donde una célula nerviosa se conecta con otra, existe una minúscula
separación llamada sinapsis. La corriente eléctrica no puede cruzar este
espacio.

A
través de él, la transmisión se hace por medio de mensajeros químicos
llamados neurotransmisores. Una vez que el mensaje llega a la membrana de
la célula siguiente, nuevamente se convierte en señal eléctrica.

El
funcionamiento adecuado de este mecanismo es esencial para la salud.

Los
neurotransmisores están relacionados con el mecanismo del sueño porque pueden
ser tanto estimulantes como depresores de la conciencia.

El
neurotransmisor llamado acetilcolina estimula ciertas hormonas que
promueven la memoria y la percepción consciente.

Ayuda
a mantenernos despiertos. Por otra parte, el neurotransmisor llamado serotonina
inhibe los estados conscientes y ayuda a iniciar el sueño.

La
serotonina se produce a partir de un aminoácido llamado triptófano,
que se encuentra contenido en la leche.

Si
se toma un vaso de leche tibia inmediatamente antes de acostarse y
complementando con vitaminas C y B6, esto puede ayudar a conciliar el sueno, ya
que aumenta la cantidad de serotonina circulante en cerebro.

El
funcionamiento de nuestro cerebro, con sus corrientes eléctricas y sus
mensajeros químicos, tiene mucho
que ver con nuestros estados conscientes y nuestros ciclos de sueño.

Los
neurotransmisores cumplen en funciones diferentes y especificas, pero en
general permiten al individuo permanecer alerta, regulan las funciones sexuales,
la conducta y la memoria.

Los
factores ambientales y emocionales también influyen sobre nuestro estado
consciente.

Déficit
de sueño

Si
nos privamos del sueño necesario, provocaremos un efecto adverso sobre todas
nuestras funciones biológicas.

¿Cuánto
sueño se necesita?

La
ciencia no nos ha dado una respuesta definida en cuanto a la cantidad de sueño
que realmente necesitamos obtener, ni de cuánto sueño podemos privarnos sin
sufrir malos efectos.

El
aumento y la disminución de 1a cantidad de sueño necesarios pueden estar
relacionados con el metabolismo del cerebro.

La
necesidad de sueño difiere con la edad.

Los bebes recién nacidos necesitan
dormir entre 16 y 20 horas diarias.

Los
niños de corta edad entre 10 y 12 horas diarias.

A
los 40 años la mayoría de los adultos necesita de 6 a 7 horas de sueño por día.

Después
de los 40 hay un ligero aumento en la cantidad de sueño que requerido.

Esta
situación perdura hasta alrededor de los 70 años, edad en que la necesidad
vuelve a disminuir.

¿Se
puede recuperar el sueño perdido en una o dos noches?

El
sueño que se pierde nunca puede ser recobrado completamente. A pesar de esto,
dicha pérdida no parece producir ningún efecto negativo permanente. La persona
que debe pasar 2 días sin dormir, si tiene oportunidad de reponerse, duerme 12
horas.

Según
estudios realizados, necesitamos reponer el 75% del sueno perdido en vez del
100%.

El
mejor sueño proviene de un período de 6 o7 horas sin interrupción.

Las
siestas cortas, pueden ser calmantes y hacer descansar, al quebrar la monotonía
de un largó día de trabajo. Sin embargo lo mejor es obtener suficiente
descanso sin interrupciones.

Tipos
de sueño

La
gente duerme por ciclos, alternando períodos de sueño
ligero y sueño profundo 4 o 5 veces en un período de 8 horas.

El
sueño ha sido clasificado en dos categorías principales: REM [movimientos rápidos de los ojos] y NREM (no movimientos rápidos oculares], correspondiendo estos a una a
etapa de sueno mas profunda. Algunos prefieren clasificar el sueño en
“desincronizado” y “sincronizado”.

Los científicos descubrieron además
que la gente alterna períodos de sueño ligero y sueño profundo, 4 o 5 veces en un período de 8 horas.

Continuará