Estoy
leyendo el análisis de un especializado en traumas, desastres y stress
comunitarios, el Dr Mordechai Benyakar (Profesor de la Universidad de Tel Aviv y
de la Universidad de Buenos Aires), especialista en estrés, y grandes desastres
.
Asegura
que el ajuste económico, la incertidumbre laboral, y el temor al inminente
descenso social, producen en el psiquismo efectos similares a los actos
terroristas, o sea la irrupción de un sinsentido, en la vida cotidiana y la
sensación de que en cualquier momento mi continuidad en el mundo puede
desaparecer por un efecto que nada tiene que ver con el azar.
Es
la sensación de que mi persona esta amenazada desde que me levanto por eventos
que no controlo, y que ya no soy mas dueño de mi mismo. A partir de ahora, todo
cambia, y los cambios son amenazantes. Se coarta la posibilidad de “proyectar
“ para el mañana
que el ajuste económico, la incertidumbre laboral, y el temor al inminente
descenso social, producen en el psiquismo efectos similares a los actos
terroristas, o sea la irrupción de un sinsentido, en la vida cotidiana y la
sensación de que en cualquier momento mi continuidad en el mundo puede
desaparecer por un efecto que nada tiene que ver con el azar.
la sensación de que mi persona esta amenazada desde que me levanto por eventos
que no controlo, y que ya no soy mas dueño de mi mismo. A partir de ahora, todo
cambia, y los cambios son amenazantes. Se coarta la posibilidad de “proyectar
“ para el mañana
Es
una inseguridad interna, que amenaza con problemas diversos de la salud, como
ser cardiacos, digestivos, y el abuso de ansiolíticos y drogas para dormir.-
No
es un problema de inseguridad, donde las personas se agrupan y proyectan una
defensa con lo que tienen, sino una distorsión: no sabemos desde donde y
cuando, va a producirse algo que nos hará peligrar.
La distorsión es
enloquecedora, porque ya no se cree en nada, ni en nadie. Esta situación genera
la violencia. Hay una falta de apoyo desde el afuera, leyes, gobiernos, fuerza
publica. Nada nos contiene o sostiene.
Esto
se define como violencia máxima. No daña tanto la agresión, porque es algo
claro, definido, previsible. En cambio, las situaciones de peligro inminentes,
las catástrofes naturales, atentados terroristas, se caracterizan por
confrontar al ser humano, en forma súbita y sorpresiva, poniendo o sacando,
toda su vulnerabilidad y desvalidamiento.
Es destructiva sobre la integridad
emocional y del pensamiento. Las estructuras que debieran actuar de sostén,
valga gobiernos, se constituyen en mas amenaza. Las guerras se declaran, son pasibles de planificación y
estrategia.
La
distorsión, es todo lo contrario. Imprevistas, amenazantes,
paralizantes.Afectan al ser y a su entorno, desapareciendo toda protección anímica,
grupal, social, del Estado.-
Esa
nebulosa que causa la distorsión brusca de nuestra existencia, causa
incertidumbre, enojo, odio y beligerancia. Producen lo primitivo: luchar, huir o
paralizarse. Todos estos hechos se manifiestan en las reacciones individuales.
CONSEJOS
PARA ENFRENTAR LA CRISIS QUE NOS AQUEJA
Frente
a la violencia, el individuo reacciona para defender lo suyo (incluso hasta para
lucrar con el desastre).- Pero la aparición de un sentimiento de AYUDA MUTUA Y
SOLIDARIDAD, CREA UN FRENTE DE CONTENCIÓN. No es fácil hacerlo, pero sí
posible.
Hoy
debemos responder a una situación totalmente distorsionante para enfrentarla,
como lo que padecemos en la actualidad. Hay algo que esta en sumo peligro en la
Argentina y en muchos países del mundo: LA SOLIDARIDAD – LOS LAZOS SOCIALES-
EL PODER CONFIAR EN EL GRUPO, O EN OTRA PERSONA.
Aquí
pudimos ver dos formas: ante las inundaciones en Córdoba, todos se unieron y
pusieron bolsas, y lograron enfrentar el desborde del río. No hubo organización
de afuera. Fue espontáneo, una defensa natural. Demostró la capacidad de lo
humano y del grupo, frente a la catástrofe.
Y en segundo lugar, los cacerolazos, que mostraron la capacidad de manifestar
enojo en forma grupal, coherente y
no violenta. Fue una bronca que pedía soluciones, y logra la transformación a
nivel social y político.
Pero hay
un peligro” no distinguir que la NO REACCIÓN, puede ser tan perniciosa para
el individuo, como para el grupo al que esta inserto, y LAS FALSAS RESPUESTAS O
SOLUCIONES.-Ante la desesperación son muy difíciles de detectar.
A
NIVEL PERSONAL; ACEPTAR QUE LAS COSAS SON ASÍ, QUE CAMBIARON.- LA SEGURIDAD A
LA QUE NOS ILUSIONÁBAMOS, YA NO VA
A SER POSIBLE…….
ES
FACTIBLE SOLO LO QUE NOSOTROS MISMOS VAYAMOS CONSTRUYENDO EN LO PERSONAL, EN LO
FAMILIAR Y EN EL ENTORNO MAS CERCANO.
Una
de las cosas que genera mas angustia, ES PRETENDER SOSTENER LO QUE YA NO ES.
Hay
que detectar lo que cada quien , tiene para enfrentar la situación NUEVA.
Buscar
apoyos y desarrollar tareas en espacios comunitarios.
BUSCAR
LAS COSAS QUE LO AYUDEN A SOSTENERSE, desde la actividad física, hasta la búsqueda
de apoyo y el desarrollo de inventivas: PERSONALES O COLECTIVAS, como una
entidad barrial, un club, la iglesia, templo, y OBVIAMENTE, CON LOS AMIGOS MAS
CERCANOS Y CON LA FAMILIA.
Es
justamente el ENTORNO AFECTIVO, el que nos va a permitir RECUPERAR NUESTRA
IDENTIDAD COMO SUJETOS, y no para REFUGIARSE en lo afectivo, sino para comenzar
a enfrentar LA REALIDAD, preservando nuestros verdaderos afectos, algo que SOLO
SE LOGRA PASO A PASO, Y HOMBRO CON HOMBRO.
Palabras
cla