Es
una propuesta interesante, dentro de las acciones que se llevan a cabo en el área
de la salud, el favorecer la incorporación de nuevos
métodos terapéuticos,
por ejemplo a través de¡ acercamiento a la naturaleza, la intervención de
animales y plantas en el tratamiento de chicos con problemas de comunicación,
muchas veces con total falta de lenguaje, como lo son los niños autistas.-
Esta
propuesta surgió después de varios años de trabajo interdisciplinario entre
profesionales, técnicos, capacitadores, talleristas, entrenadores, voluntarios
y, naturalmente, padres, en el Hospital “Pedro de Elizalde" ex Casa
Cuna, de la ciudad de
Buenos Aires.
¿Cómo
se lleva a cabo?
Al
no haberse desarrollado el lenguaje en un niño, no hay posibilidad de
interrelación social y esto dificulta muchísimo la rehabilitación.-
Por
ello, se introduce la estimulación de los niños a través de¡ intercambio no
verbal con los animales y las plantas, como una técnica que permita acercarse
al logro de¡ lenguaje como medio de comunicación.-
La
posibilidad de medir y evaluar la calidad de las reacciones de los niños a esta
estimulación se asienta en la posibilidad de registrarlas a través de la
videofilmación la relación con las plantas y animales, con las personas, con
los objetos. Cómo recibe el niño
un acto de comunicación y cómo responde al mismo.-
También
es necesario evaluar cómo expresa y cómo recibe los sonidos y cuánto de ésto,
se relaciona con el área social.-
Los
expertos utilizan la palabra etograma para analizar estas interacciones.
Se
trata de inventarios de comportamiento que
se apoyan en sistemas simples de significación de las acciones mínimas que
cualquier organismo vivo puede desarrollar cuando interacciona con otro
organismo.-
Para
analizar las conductas y comportamientos de los niños a través de las
videofilmaciones, los profesionales y técnicos trabajaron evaluando la
participación de¡ cuerpo en las
acciones, cómo éstas se ubican en el espacio
y la frecuencia con que aparece un determinado tipo de acción en un cierto
período de tiempo.–
La
interrelación de cuerpo, espacio y tiempo va a permitir determinar cuál es el
sentido que tienen esas acciones, esos movimientos- cuál es su intensidad y
velocidad. Por eso, la necesidad de
contar con la videofilmación porque el trabajo debe ser minucioso.-
Otro
aspecto a tener en cuenta y que también se relaciona con la posibilidad de
interacción de los niños, son los momentos del día, los días de la semana,
los meses o las estaciones del año en las cuales presentan mayor o menor
agilidad de movimientos.-
La
comparación de las frecuencias del comportamiento humano de los niños, con las
frecuencias del comportamiento animal de las mascotas, permite calcular el grado
de interacción y las necesidades propias de ese paciente.
Además, para decir que ese niño ha pasado de realizar acciones a
desarrollar una conducta o un comportamiento es porque se detectó una motivación,
un objetivo o intencionalidad en esa secuencia filmada.-