Posiblemente, varias
veces le habrán dicho, a usted o a un ser querido, que era un típico “taurino”.
Sin embargo… ¿Es tan así? Si realmente quiere comprobar esto, tome papel y
lápiz y prepárese para averiguar que cuánto hay de Tauro en su personalidad, o
la de su ser amado.
Lea atentamente cada una
de las siguientes situaciones, y conteste rápidamente, siguiendo sus primeros
instintos (o pídale que haga esto mismo a su querido taurino), si concuerda con
la declaración. Para cada afirmación con la que concuerde positivamente, realice
al costado una marca. Al final del examen, encontrará las instrucciones para
saber cómo interpretar sus anotaciones.
El examen
1. Suelo tocar a los
demás cuando hablo con ellos, y pienso que el contacto físico regular en una
relación romántica, es extremadamente importante.
2. Un anochecer
magnífico a solas, implicaría una buena comida, y un largo baño con sales
exóticas y aceites de baño.
3. Si creo que tengo
razón en cierto asunto, no escucho ningún argumento opuesto. ¿Para qué malgastar
mi tiempo cuando sé que tengo razón?
4. Casi nunca llego tarde
a una cita, y me enorgullezco de mi actitud comprometida.
5. Si no pienso que
cierto emprendimiento tendrá éxito, probablemente no lo comenzaré. Trato de ser
práctico acerca de mis metas.
6. Cuándo triunfo y
recibo las recompensas financieras de ese éxito, soy el primero en consentirme
con lo que esas riqueza nuevas me pueden ofrecer.
7. Incluso cuando un
determinado proyecto parece estar condenado al fracaso, y debería ser
abandonado, sigo adelante de todos modos. Yo no habría comenzado el proyecto si
no hubiera creído que tendría éxito.
8. He sido acusado de ser
materialista.
9. Puedo ser
excesivamente sentimental. ¡Tengo cajas enteras de cartas, notas y tarjetas de
amor, que van desde los días del jardín de infante, y llegan hasta el presente!
10. Me encanta darme
gustos con las cosas más finas de la vida. Aunque signifique un costo extra para
mi bolsillo, me pediré siempre un café doble con canela, antes que un café negro
simple.
11. Cuándo me pierdo, es
más probable que continúe siguiendo a mis instintos antes que frene y admita que
no tengo la menor idea de dónde estoy.
12. Tengo éxito en mis
relaciones, pero si tengo un defecto en esto, ese es que puedo ser algo
dependiente de mi pareja.
13. Soy conservador de
muchas formas. Invierto conservadoramente, estoy cauteloso de realizar un cambio
de trabajo, etc.
14. Aún cuando un
proyecto es difícil y potencialmente frustrante, yo soy muy paciente y yo nunca
pierdo la paciencia para llevarlo a cabo.
15. Nunca me gustó hacer
“exhibiciones públicas” del cariño que siento hacia mi pareja.
16. Aunque suene raro,
puedo perder el control de mis emociones si pienso que alguien es injusto
conmigo. Pero, aunque puedo tener un gran arrebato, casi siempre logro calmarme
lo bastante rápido como para que regrese la paz.
17. Disfruto de las cosas
hermosas, y puedo gastar demasiado solo para gozar de un ramo de flores, las
entradas a una exposición de arte, o para obtener ese jarrón que tan bien queda
en mi living.
18. Soy bastante atlético
y disfruto mucho del ejercicio físico y de los deportes competitivos.
19. Soy muy romántico con
mi pareja, y también muy leal. ¡Jamás se me cruzaría por la cabeza coquetear con
otra persona si estoy en una relación!
20. Me han dicho que
tiendo a ser algo posesivo con mis amigos y parejas.
Realizando el cálculo
Cada marca que haya
hecho, tiene un valor de un cinco por ciento. Por ejemplo, si concordó con
quince de las afirmaciones, tiene una cuenta de (15 X 5) = 75%. Esto significará
que un 75 % de sus características de personalidad (o de la persona a la que le
haya realizado el test) concuerdan con la típica de Tauro.
Conociendo la personalidad “típica” de Tauro
Tauro (21 de abril- 20 de
mayo) es el segundo signo del Zodiaco. Suelen buscar ganar todos los juegos, en
gran medida para poder justificar la juerga y diversión al alcanzar victoria.
Son fieles, leales y extremadamente determinados. Seguirán tercamente un
proyecto hasta llegar al final, incluso después de que otros lo hayan abandonado
hace largo tiempo. Pueden llegar a ser discutidores, pero igualmente prefieren
mantener la filosofía del “Zen”. Un Taurino nunca se avergüenza de consentirse
con las cosas más finas en la vida, aunque ello esté más allá de sus medios
económicos.
