La
modalidad de
robar vehículos estacionados o en movimiento, preocupa a quienes
utilizan este medio para transportarse durante gran parte del día, al igual que
para quien hace de esto, un medio de vida.
Los
“objetivos fáciles” son los mas elegidos por los roba coches, que en
general tratan de escaparles a las complicaciones. Por eso, es recomendable
grabar en los cristales de las ventanillas y en el parabrisas, el número de
matrícula de su coche.
Para ello, simplemente solicite el servicio a quien le
vende el automóvil, o consultando
a casas especializadas que se dedican a ello.
Si
estaciona en la vía publica, déjelo en un lugar de buena iluminación. No se
confíe por la presencia de otros vehículos, muchas veces el dejarlo en un
sitio oscuro y alrededor de otros autos estacionados le puede causar la sorpresa
de que una vez que usted vuelve, los otros ya se han ido.
Instale
los conocidos dispositivos antirrobos como barras metálicas ajustadas a volante
y pedal o las cadenas de seguridad que se venden en las casas de repuestos o
supermercados. para mayor precaución, instale cerraduras especiales en puertas
y baúl y algún dispositivo de alarma que corte la corriente (se activan cuando
la fuente se aleja a una distancia de un control remoto que está ubicado en el
llavero).
Se
ha observado que la modalidad de
asalto a coches en semáforos o esquinas, se
produce de la siguiente manera: una persona observa las condiciones del auto y
avisa a otra, si el seguro de la puerta esta abierto o cerrado.
Si está
abierto, la otra persona abre la puerta del acompañante o incluso del conductor
y lo intima a manejar hacia otro lugar. Consejo: trabe las puertas.
Es
fundamental no recoger extraños en las rutas, y mucho menos en la ciudad. Y si
no tiene sistema de alarma, bloquee el volante sacando la llave de contacto y
haciéndolo girar. Revise que las puertas, ventanillas y baúl estén bien
cerrados. Muchos delincuentes pasan “probando” puertas y aprovechando los
descuidos.
No
deje documentos ni objetos de valor dentro del vehículo, y mucho menos a la
vista sobre los asientos o guanteras. Así evitará llamar la atención de quien
está dispuesto a romper un vidrio para llevarse una campera o una cartera que a
lo mejor no contiene nada de valor.