Mujeres |
Hombres |
Generalmente nunca pierden el deseo, y muchas veces lo contrario, aumenta.
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Las dudas. Se dan en gran cantidad de casos en donde las mujeres creen que “existe otra” o que “ ya no la quiere”. Eso puede desembocar en periodos de conflictos de pareja o depresión. Inversamente, también es muy frecuente la fantasía masculina de “si no funciono como antes, se va a buscar otro”.
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La viudez es un factor de influencia en el deseo sexual
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La viudez no afecta tanto al hombre, que tiene mayor capacidad de encontrar un nuevo rumbo sexual
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La menopausia afecta positivamente a unas y negativamente a otras. Algunas se ven liberadas de la posibilidad de ser madres y dan rienda suelta a sus deseos. Las otras encuentran la excusa perfecta para dejar de lado sus fantasías definitivamente
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En caso de reaccionar negativamente con la menopausia, la pareja comienza a experimentar un desgaste y malestar lógico
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La producción de testosterona a través de la glándula suprarrenal (que nunca envejece) permite a las mujeres tener deseo siempre, debido a que esa hormona nunca deja de producirse
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La falta de información de la mujer acerca de los potenciales problemas sexuales del hombre puede afectar la autoestima masculina, empeorando los problemas.
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La lubricación disminuye con la menopausia y la vagina deja de ser elástica, tersa y húmeda; esta humedad que aumenta durante la excitación y el coito, permite una calidad de relación estupenda y satisfactoria. Este fenómeno se produce gracias a la acción de las hormonas que provienen del ovario, básicamente de los estrógenos. Con la menopausia, desaparecen los estrógenos y las condiciones de la vagina no son tan propicios para el disfrute sexual, aunque en un grupo de mujeres, las glándulas suprarrenales sustituyen la función del ovario
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La lentitud en la erección, agregada a la menor rigidez, genera angustia y afecta psicológicamente. Se puede llegar a necesitar ayuda especializada. Por otro lado, el desconocimiento hace que muchos hombres piensen que la falta de lubricación de su pareja se debe a que “ya no lo quiere, o desea, como antes”.
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El periodo refractario
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Es el espacio de tiempo que transcurre entre un orgasmo y otro; esto en la mujer es casi inmediato, pues una mujer que llega a tener un orgasmo y continúa siendo estimulada sexualmente pude llegar a tener un segundo orgasmo de manera casi inmediata, y luego un tercero, etc., Este hecho depende de la calidad de estimulación, el estado anímico y de la predisposición de la mujer. Esta cualidad se mantiene toda la vida.
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En el hombre se denomina periodo refractario al tiempo transcurrido entre una erección y la siguiente luego de haber eyaculado. En pocos jóvenes se da el fenómeno que pueden eyacular dos veces sin terminar la erección; entre los quince y dieciséis años, esto ocurre solo al 6% al 8% de los jóvenes, y finaliza esta capacidad en un par de años. Así la capacidad de tener una eyaculación y volver a tener otra más de manera inmediata dura muy poco tiempo.
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El orgasmo
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Muchas mujeres pierden esta capacidad por factores psicológicos, los cuales en su mayoría provienen de la sociedad y, en muchas ocasiones, de su pareja que descubre asombrada esta capacidad y en muchas ocasiones la envidia.
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El orgasmo no cambia con la vejez, las sensaciones son las mismas que en la juventud o mayores debido a la experiencia (de no ser así, podría deberse tan sólo a un problema circunstancial o fisiológico)
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Soluciones
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Administrar hormonas de suplemento que vienen acompañadas de una pequeña cantidad de hormonas masculinas, lo cual no solo permite mantener el adecuado funcionamiento de la vagina, sino también un buen nivel de deseo sexual
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En general, los problema de erección tienen origen psicológico. Mejore sus condiciones de pareja y en caso de persistir el inconveniente, consulte a un especialista. De todos modos, a esta edad siempre hay que descartar la existencia de problemas orgánicos (sobre todo circulatorios, de próstata y diabetes).
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