En ciertas ocasiones se pueden
experimentar dificultades en el momento del
encuentro amoroso. Puede haber
conflicto tanto por parte del hombre como por parte de ella.
“Si la pareja no se conoce y
sucede este imprevisto por primera vez, será un momento de mucha tensión y por
más que se intenten varios modos solamente se logrará nerviosismo”, sostiene
la especialista española Ruth Domínguez Pradera.
Posibles
causas::
· Factores netamente
psicológicos (la manera en la que ha sido educada la mujer influye mucho). Se
puede sentir culpa, incomodidad, confusión, etc.
· Estimulación
inadecuada por parte de la pareja
· Depresión
· Ansiedad
· Infección genital
· Vaginismo (los
músculos de la vagina se contraen y se cierra)
· Dispareunia (dolor en
el momento del encuentro)
Lo primero que hay que hacer ante
esta situación es no alarmarse. “El éxito se basa en acudir rápido a un
especialista. Una mujer suele tardar en promedio unos cuatro años en asistir al
médico y contar este problema.
Parece mentira, pero es así. Por
miedo o vergüenza prefieren callar y seguir manteniendo una vida íntima absurda.
El dolor puede desaparecer en el momento en que se confía en un profesional que
pueda analizar la real causa. Es más sencillo de lo que se cree”, sostiene
la especialista.
Consecuencias si no se consulta al especialista:
· Puede existir alguna
lesión en la vagina que si no se revisa podría empeorar
· Tristeza
· Ansiedad
· Frustración
· Culpabilidad
· Baja autoestima
· Evitar las relaciones
· Deterioro de la pareja
Consejos
prácticos:
· Los
juegos previos son
necesarios para lograr una buena lubricación. “Sin excitación la vagina de
una mujer está seca y eso es sinónimo de mucho dolor al hacerlo”, comenta
Pradera.
· La paciencia en la
pareja es clave para sobrellevar la situación lo mejor posible. “No cerrarse
y ocultar el problema o pensar que la próxima vez no pasará.
Claro que hay que seguir intentando más allá de la probabilidad de que se
reitere la circunstancia, pero hay que acudir a un médico para valoración”,
aconseja la sexóloga.
· Intentar posturas
sencillas para facilitar el encuentro.
· La relajación es clave
para revertir el cuadro. Un buen baño de inmersión, unos masajes o una cena
romántica son buenas excusas para predisponer a un encuentro fructífero.
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