Más de 20.000
estadounidenses contraerán cáncer de estómago este año, de acuerdo con la
Sociedad Americana del Cáncer. Cerca de 13.000 van a morir. La mayoría de las
personas diagnosticadas con cáncer de estómago está entre los 60 y los 70 años.
La Sociedad Americana del
Cáncer dice que más de 13.000 nuevos casos de cáncer de esófago se descubrirán
en los Estados Unidos y afectarán mayormente a los hombres. La mayoría de las
personas con cáncer de esófago eventualmente muere de esta enfermedad porque
generalmente se diagnostica ya en un estado avanzado.
Investigadores de la
Universidad Tufts, en Boston, atendieron a cerca de 250 personas, tanto con
cáncer de estómago como de esófago. Los pacientes fueron comparados con cerca de
450 personas sanas. El fin era determinar si había alguna diferencia en los
tipos de comidas ingeridas entre aquellos que tenían y que no tenían cáncer.
Después de haber evaluado
los cuestionarios de todos los participantes, se identificaron dos patrones
dietarios principales. La “dieta saludable” consistía en comidas con altas
cantidades de fruta, vegetales y granos, y bajas cantidades de carne roja,
carnes procesadas y salsas. La “dieta rica en carne” era alta en carnes rojas y
pobre en frutas y cereales.
Otros patrones dietarios
identificados fueron dietas con muchos bocadillos salados, postres, leche o pan
blanco.
Los resultados del estudio
están publicados en la edición de enero del American Journal of Clinical
Nutrition
Comparados con quienes prefieren dietas saludables, las
personas que siguen dietas ricas en carne tienen 3,5 veces más posibilidades de
contraer cáncer en el esófago, y casi 3 veces más de tener cáncer en el
estómago.
A los otros patrones
dietarios tampoco les fue demasiado bien comparados con las dietas saludables.
Las dietas que incluyen
muchos bocaditos salados casi triplican el riesgo, y las que se basan en pan
blanco aumentan en más de dos veces las chances de contraer cáncer de esófago.
Algunas salsas también incrementan la posibilidad de contraer este tipo de
cáncer.
Pero hay comidas se pueden
ingerir para ayudar a protegerse de estos dos tipos de cáncer, de acuerdo a este
estudio.
Productos lácteos, pescado,
cualquier tipo de verdura, frutas cítricas, jugos, y pan negro pueden disminuir
el riesgo de cáncer de esófago en más de la mitad. Aves de corral, vegetales
amarillo oscuro, cereales y tomates también sirven para reducir el riesgo.
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